La familia del exmagistrado Manuel Gaona Cruz cuestionó públicamente la representación de su papel en la película 'Noviembre', dirigida por Tomás Corredor, luego de que en la cinta se pronunciara una frase que, según ellos, distorsiona los hechos y afecta la memoria del jurista asesinado durante la toma del Palacio de Justicia el 6 de noviembre de 1985.
El debate surgió por una línea del guion en la que se afirma: “Ni usted Gaona, que es uña y mugre con estos terroristas”, expresión que, según la familia, presenta al magistrado como simpatizante del grupo armado M19. En respuesta, Juliana Gaona Bejarano, hija del magistrado y abogada, explicó que la familia interpuso una acción de tutela para defender su buen nombre.
¿Qué dijo la familia Gaona sobre la representación en la película Noviembre?
“Hoy hablo como abogada y como hija en representación de la familia Gaona Bejarano, para defender la memoria y la dignidad de mi padre, que hemos intentado proteger ante la justicia colombiana”, indicó. Posteriormente, afirmó que el fallo fue a favor de ellos y que en este se reconoció que la película difundió una “narrativa falsa e injuriosa” al vincular a su padre con el grupo que lo asesinó.

Juliana Gaona precisó que el magistrado fue asesinado por el M19 durante los hechos del Palacio de Justicia. “La película Noviembre presenta a mi padre como colaborador del grupo armado, que lo secuestró durante 28 horas y posteriormente lo asesinó de forma atroz”, dijo.
También indicó que la decisión del juez no limita la libertad creativa. “En este fallo no hay censura. La decisión judicial no cercena la libertad artística ni la libertad de expresión. Lo que hace es proteger la memoria, la verdad y los derechos más básicos de una persona que entregó su vida para defender a su país”, puntualizó.
¿Qué reveló la Comisión de la Verdad sobre el caso Gaona Cruz?
El informe de la Comisión de la Verdad abordó el caso del magistrado Gaona y negó un supuesto vínculo con el M19. En el documento se establece que el magistrado había recibido amenazas por su ponencia sobre el tratado de extradición y que, en octubre de 1985, su familia tuvo que cambiar varias veces de residencia por amenazas de bomba y sufragios. El exmagistrado era perseguido por Pablo Escobar.
El mismo informe señala que Gaona no salió con vida del Palacio y que “fueron los guerrilleros los que dispararon directamente a Gaona”. Estas conclusiones contradicen la representación cinematográfica.

La familia sostuvo que la tutela concedida busca preservar la memoria y el buen nombre del magistrado, sin imponer restricciones artísticas. Juliana Gaona enfatizó: “La libertad de creación tiene límites. No puede distorsionar hechos históricos, estigmatizar a las víctimas o afectar la reputación de quien defendió la justicia”.
El contraste: la libertad creativa
En una columna, Mario Jurish defendió la libertad creativa en obras artísticas, señalando que “las obras artísticas no están sometidas, como sí lo están las obras periodísticas, al deber de guardar fidelidad con los hechos verificables”. Según su criterio, el arte puede exagerar, inventar o incluso distorsionar los hechos.
El periodista cultural afirmó, además, que si los hechos fueran cien porciento fieles a la realidad, la obra de Gabriel García Márquez debería ser cambiada, por el apartado de la cifra que el autor nacido en Aracataca dio a propósito de la masacre de las bananeras.
Su columna cerró proponiendo que se pusiera en discusión la responsabilidad de lo sucedido en el Palacio de Justicia desde la plaza pública.