Franquicia de Burger King se declaró en quiebra y busca comprador: ¿cerrarán sus restaurantes?
La compañía se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras tras acumular deudas que alcanzan los 37 millones de dólares. Esto pasará con los locales.

Una de las franquicias más grandes de Burger King se acogió al Capítulo 11 de la ley de quiebras, tras acumular quiebras luego de acumular cerca de 37 millones de dólares en deudas. La empresa, que operaba 57 locales, no logró sobreponerse a la caída del consumo, el aumento sostenido de los costos y el funcionamiento deficitario de varios puntos de venta.
De acuerdo con los documentos judiciales, la decisión dejó en evidencia un entorno cada vez más desafiante para los franquiciados del sector de comida rápida. A factores externos como las condiciones macroeconómicas se sumaron problemas internos como litigios sin resolver, falta de ofertas de compra y obligaciones contractuales con la casa matriz que profundizaron la crisis.
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Y es que, entre 2023 y 2024, los ingresos cayeron con fuerza y las pérdidas operativas se duplicaron, pasando de 6,3 a 12,5 millones de dólares. A esto se sumó una estructura de apalancamiento excesivo derivada de la compra de los restaurantes en 2018, junto con las secuelas financieras de la pandemia, que impidieron a la empresa recuperar su estabilidad.

Cuál es la franquicia de Burger King que se declaró en quiebra
Se trata de Consolidated Burger Holdings, una de las franquicias más grandes de la cadena Burger King en Estados Unidos, que se declaró en quiebra tras acumular deudas que alcanzan los 37 millones de dólares. La compañía, con sede en Destin, Florida, operaba 57 restaurantes ubicados principalmente en el norte de Florida y el sur de Georgia.
Según los documentos judiciales, el pedido de quiebra fue presentado bajo el Capítulo 11, un proceso que permite a las empresas reorganizar sus finanzas y continuar operando mientras negocian con sus acreedores. La decisión se atribuyó a una combinación de factores que incluyeron "caída del consumo, aumento constante de costos y locales que funcionaban a pérdida".
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Durante su último año fiscal, Consolidated reportó ingresos por 67 millones de dólares, pero terminó con un déficit operativo de 12,5 millones. En 2023, las pérdidas alcanzaron los 6,3 millones, mientras que los gastos fijos como alquileres y deudas se mantenían en niveles elevados. "La empresa venía con el agua al cuello desde hace tiempo", señalaron medios internacionales.

La presión no solo vino del mercado. En enero, la propia Burger King inició una demanda contra la franquicia por incumplimiento en los acuerdos de remodelación de los locales. Aunque ambas partes lograron un acuerdo, "la relación ya estaba desgastada", indicó el diario económico argentino, Ámbito.
Qué pasará con los restaurantes tras la quiebra
A pesar de la declaración de quiebra, Consolidated Burger Holdings continuará operando sus restaurantes mientras busca un comprador. De acuerdo con los informes, la compañía ha estado intentando vender sus activos durante los últimos siete meses. “Es posible que tenga que adoptar un enfoque más agresivo en sus esfuerzos”, advirtió el medio Local 12 de Cincinnati.
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Desde la casa matriz de la cadena, afirmaron que están "reestructurando el sistema de franquicias" y que los locales que no invierten o no rinden serán asignados a operadores con mejores resultados. Esta decisión apunta a asegurar la sostenibilidad del negocio en medio de un entorno económico desafiante.

La situación de Consolidated no es un hecho aislado. Otras franquicias importantes como Meridian Restaurants Unlimited, Toms Kings y Premier Kings, que en conjunto operaban 378 sucursales, también se acogieron a procesos de quiebra. Todas enfrentaban una caída en el flujo de clientes tras la pandemia, inflación persistente y márgenes de ganancia cada vez más limitados.
En este contexto, la continuidad de las operaciones dependerá de si la franquicia logra encontrar un nuevo operador dispuesto a asumir el control de las sucursales. Mientras tanto, la marca seguirá funcionando bajo administración de Consolidated, a la espera de que el proceso de venta permita preservar los empleos y la actividad comercial en los puntos afectados.