La Policía Nacional, entregó en calidad de extraditado a Juan Carlos Francisco Bossi, requerido por la justicia argentina y catalogado por su país como uno de los más buscados a nivel internacional. Autoridades ofrecían por él una recompensa de 500 mil pesos argentinos, equivalentes a $104 millones.
“Su búsqueda internacional se da, y quiero referirme textualmente al requerimiento hecho por las autoridades judiciales argentinas, "por su presunta participación en un plan clandestino de persecución, secuestros, torturas y desaparición física (homicidios) registrado entre 1977 y 1978” contra personas que integraban movimientos o agrupaciones durante el último gobierno de facto en la República de Argentina, instaurado a través del llamado Proceso de Reorganización Nacional”, indicó el coronel Juan Carlos Gómez, jefe de la Oficina Central Nacional de Interpol en Colombia.
A su servicio tenía cinco personas que se encargaban de realizar sus diligencias personales tales como pagos de alquiler y transacciones bancarias, esto con el fin de no dejar rastro de su presencia en el país.