El excanciller y precandidato presidencial Luis Gilberto Murillo se pronunció desde Barranquilla sobre las tensiones diplomáticas entre Colombia y Estados Unidos, pidiendo que se gestione la exclusión del presidente Gustavo Petro de la denominada "Lista Clinton".
Murillo advirtió que las "provocaciones" bilaterales no resultan beneficiosas, por lo que propuso retomar la interlocución en un escenario estrictamente diplomático, dejando de lado los conflictos. Recordó, además, que el expresidente estadounidense Donald Trump se caracteriza por un enfoque pragmático.
“Colombia tiene que crear las condiciones, no a la provocación, no a la diplomacia del trino; buscar realmente buenos componedores, dejar de hacer énfasis en las diferencias, y más bien focalizarse en las oportunidades que pueda haber en esa relación”, explicó el excanciller.
El líder político insistió en que el manejo de la relación debe trascender los aspectos ideológicos y políticos, ya que debe ser una relación de Estado a Estado.
Inclusión de Petro en Lista Clinton es un error
Murillo calificó la inclusión del jefe de Estado en dicha lista como un error, señalando la falta de entendimiento político derivada de las mutuas confrontaciones. "Yo creería que esto ha sido más un tema de la falta de entendimiento político por las provocaciones, es decir, usted no puede provocar y esperar que no provoquen del otro lado, entonces para desescalar hay que eliminar las provocaciones," afirmó.
Sostuvo que manejar la diplomacia bajo la óptica de diferencias políticas o ideológicas inevitablemente conducirá a un "desastre", y subrayó la importancia estratégica de la alianza bilateral: “La relación con Estados Unidos es la más importante para Colombia, allá va el 30% de nuestras exportaciones; existe cooperación en seguridad; hay atracción de inversión extranjera directa; y viven tres millones de colombianos, incluidos muchos barranquilleros en Florida”.
Finalmente, en el foro Expo Portuaria de Asoportuaria, Murillo hizo un llamado a mantener el Occidente como una "zona de paz" y a convertir este objetivo en una política persistente del territorio nacional. Manifestó, además, que la lucha contra el narcotráfico debe ser conjunta y que constituye una problemática global que no atañe solo a estas dos naciones.