Tras siete semanas de programación, la Bienal Internacional de Arte de Bogotá - BOG 25 llegó a su fin con un balance de más de tres millones de asistentes en 25 sedes y espacios públicos intervenidos con obras y experiencias artísticas.
El secretario de Cultura, Santiago Trujillo, destacó que el evento se consolidó como un hito cultural que no solo impulsó a artistas emergentes y consolidados, sino posicionó a Bogotá en el mapa internacional de grandes encuentros de artes visuales.
“Fue una plataforma para el fomento de los artistas emergentes consolidados de las artes plásticas y visuales, fue una apuesta para internacionalizar a Bogotá a través de la cultura, nos pusimos en el mapa de los grandes eventos de artes plásticas y de bienales del mundo
Familias, jóvenes, adultos mayores y niños participaron de recorridos mediadores y actividades diseñadas para acercar el arte a todo tipo de públicos.
“La Bienal fue una experiencia transformadora, capaz de construir orgullo y confianza en nuestra ciudad. Hoy millones de bogotanos aman más a Bogotá”, señaló.
El secretario también resaltó tres impactos del certamen: el fortalecimiento de la escena artística local, la proyección internacional de Bogotá como capital cultural, y el impulso económico a las industrias creativas, el turismo y la oferta hotelera.
Aunque las cifras definitivas de la derrama económica están siendo calculadas por la Secretaría de Desarrollo Económico, el Distrito confirmó que el incremento en la ocupación hotelera y la llegada de visitantes nacionales e internacionales fue notorio.
Durante el evento confluyeron distintas iniciativas culturales y creativas. En el marco de la Bienal se realizaron el Encuentro de Culturas y Ciudades —que reunió a 350 líderes de 22 países—, la feria ARTBO, el concurso internacional de violín y, en paralelo, el Festival Cordillera, integrando una oferta cultural de alcance global.
El funcionario confirmó que la administración ya trabaja en la próxima edición, la BOG 2027, que aspira a convertirse en un evento permanente e icónico, al nivel de los festivales al parque.
El Distrito celebra lo logrado y mira hacia adelante con la intención de consolidar a Bogotá como una de las capitales culturales más influyentes de la región.