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En la Cumbre del Pacífico 2019, el gobernador de Nariño, Camilo Romero, y la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez se enfrentaron por los argumentos en contra y a favor de la implementación del glifosato como una de las medidas del Gobierno Nacional en la lucha contra los cultivos ilícitos.
“Le dijimos a vicepresidenta que honren la palabra empeñada por el Estado colombiano: cumplan con sustitución de cultivos y dejen de insistir en el camino equivocado del glifosato porque afecta la salud, el ambiente, la vida, además resulta muy costoso”, argumentó Romero.
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A lo anterior, la vicepresidenta respondió desde su cuenta de Twitter: “Gobernador, claro que prefiero la sustitución de cultivos, pero no podemos dejar de un lado el objetivo de acabar con el narcotráfico, sí o sí, es una medida impostergable. Esta lucha no es la de un gobierno o una lucha de los militares, es la lucha de toda la sociedad”.
Al respecto, Romero contraatacó y dijo que el ministro de Defensa, Guillermo Botero, no había podido responder ante la Corte Constitucional cuánto costaba la fumigación de una sola hectárea. Según él, en su momento dijo que el costo aproximado sería de aproximadamente 72 millones de pesos. Para Romero, este valor teniendo en cuenta el impacto ambiental, la vida y la salud es injustificable.
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Por su parte, la vicepresidenta Marta Lucia Ramírez, aseguró que en este sentido las políticas del gobierno anterior son insuficientes. Además, detalló que el crecimiento exponencial de cultivos cocaleros en Colombia se debe a la laxitud del país frente a este tema, pues se pasó de tener 48.000 hectáreas de hoja de coca sembrada a tener 206.000 hectáreas en la actualidad.
