“Estamos en una campaña de odio”: exministro Mauricio Lizcano tras amenazas a su padre
Sobre la motivación política del hecho, Lizcano señaló que "si esto fuera contra mí, soy consciente de los riesgos que implica ser candidato presidencial".

El precandidato presidencial Mauricio Lizcano informó que ayer en la tarde recibió un arreglo floral con amenazas dirigido a su padre, Cartulio Lizcano, en la sede de su campaña en Manizales. Durante una entrevista en La FM, Lizcano calificó el hecho como "un acto cobarde y miserable" y expresó preocupación por la integridad de su familia.
"Mi padre estuvo secuestrado ocho años por las FARC y este envío lo revictimiza", dijo Lizcano al describir el impacto del suceso en su familia. Además, aseguró que desconocen el origen de la amenaza y que no tienen claridad sobre si el hecho está relacionado con la campaña, con él o con su familia.
¿Qué medidas de seguridad existen para proteger a la familia de Mauricio Lizcano?
El exministro indicó que su padre y su familia no cuentan con un esquema de seguridad reforzado. "Mi padre estuvo cubierto por un esquema de protección que le retiró la ONP hace tres años. Actualmente conservamos solo el esquema básico que tenía como exministro", señaló. Lizcano agregó que, tras el hecho, intentó comunicarse con el ministro del Interior, ministro de Defensa y director de la policía, pero no recibió respuesta inmediata.
Respecto a la reacción de las autoridades, el precandidato explicó: "A uno le contestan que envíe una carta relatando lo sucedido para que tomen medidas", refiriéndose a la solicitud hecha por la DIPROM. Agregó que enviará las cartas para que se evalúe la protección de su padre y se tomen acciones pertinentes.
¿Cuál fue la respuesta del gobierno ante la amenaza recibida?
Durante la entrevista se informó que el ministro Armando Benedetti publicó un comunicado indicando que la policía recibió la denuncia y que se dio instrucción a la DIJIN para adelantar investigaciones y coordinar con la UNP la valoración del esquema de protección. Lizcano aseguró que no recibió comunicación directa y que se enteró de la reacción a través de los medios.
Sobre la motivación política del hecho, Lizcano señaló que "si esto fuera contra mí, soy consciente de los riesgos que implica ser candidato presidencial", pero enfatizó que lo que más le preocupa es la seguridad de su padre. También mencionó que la situación ocurre en un contexto de polarización y campañas de odio en Colombia.
"El odio se incrustó en esta campaña presidencial", declaró Lizcano, agregando que los extremos están dirigiendo la narrativa política, lo que, según él, desencadena actos de violencia como la amenaza recibida.
Finalmente, Lizcano describió la reacción de su familia. Indicó que su padre recibió la amenaza con tranquilidad, mientras que su madre presentó angustia y preocupación. "Mi papá lo tomó tranquilo porque quería dar calma a mi mamá", afirmó. La familia Lizcano espera que las autoridades investiguen y tomen decisiones rápidas para proteger la integridad de los involucrados.
El precandidato reiteró que la denuncia no tiene relación con la campaña electoral en sí, sino que se trata de un acto directo de intimidación hacia su familia. La investigación y medidas de seguridad están en curso por parte de las autoridades.