En el calor de los hogares, al rededor de una mesa con comida y esperando el abrazo de sus seres queridos, millones de colombianos están listos para la tradicional celebración de Navidad.
Regalos, música y la oportunidad de compartir con las personas especiales.
Sin embargo, este año decenas de madres, esposas, hermanas e hijos estarán esperando la llegada de un ser querido: un militar o un policía que no llegará por causa de la violencia y de grupos al margen de la ley que los mantienen secuestrados.
En condiciones precarias, cambuches improvisados, y rodeados de guerrilleros armados con fusiles, a estos uniformados la guerra les arrebató la oportunidad de vivir una feliz Navidad.
Mensajes de mamá
Es por eso que sus familias, este 24 de diciembre, les envían un mensaje de paz, esperanza y fortaleza, con el anhelo de que regresen a casa.
Como el caso de Sandra Martínez, madre del policía Jarol Luis Ricardo Martínez, secuestrado en Cauca, cuando iba a conocer a su hija recién nacida.
"Hijo, te mando este mensaje de amor. Estamos bien, tu papá está bien, tus hermanos, tu niña está linda, hermosa, hija que no conoces, pero que yo sé que pronto la vas a conocer, porque pronto vas a estar con nosotros. Ese es el aguinaldo más grande que Dios nos puede dar a nosotros, tu familia. Dios te bendiga, te guarde y te cuide en todos tus caminos, mi amor. Aquí estamos, tu familia, esperándote con los brazos abiertos, mi amor", dijo la mujer.
Tras cinco meses de secuestro del soldado Jamerson Guachetá, su madre, Yuri Guachetá, lo sigue esperando con los brazos abiertos. En este fecha especial, elevará una oración para pedir por un nuevo abrazo de su hijo.
"Es muy difícil pasar un fin de año sin él, pero la familia y yo, como mamá, lo estamos esperando. Con la ayuda de Dios, sé que muy pronto no lo regresarán. Tenemos que confiar todos y estar en manos de Dios".
Héroes con uniforme
La situación se repite con decenas de familias, que a la medianoche encenderán una luz de esperanza para el iluminar el camino de regreso.
Entre tanto, en cada rincón de Colombia, en la espesa selva, bajo el frío de la noche, bajo los cielos y sobre las aguas, miles de soldados, marinos, aviadores y policías, también lejos de casa, seguirán dando su vida para garantizar la seguridad del país.
A todos ellos, Feliz Navidad.