El síndrome postvacacional se considera un trastorno adaptativo derivado de la sensación de malestar que surge tras un periodo prolongado de descanso y desconexión de la rutina habitual.
Este malestar dificulta la readaptación al ritmo laboral, manifestándose a través de síntomas como tristeza, ansiedad, alteraciones del sueño, cansancio, cambios en el apetito, baja productividad laboral e irritabilidad.
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Alejandro Sarmiento, líder científico de Bodytech, explica que la sintomatología es similar a la generada por el estrés agudo, y destaca la importancia de la prevención para combatir este síndrome, que generalmente no perdura más de 15 días.
“La sintomatología es similar a la causada por el estrés agudo. El problema radica en una mala adaptación que tiene el individuo a las nuevas demandas del ambiente laboral y que puede generar ciertas dificultades en la calidad de vida. Estos síntomas usualmente no duran más de 15 días y la mejor manera de combatirlo es con la prevención”, señala.
Consejos para enfrentar la vuelta a la rutina:
- Comenzar gradualmente: Iniciar el trabajo de manera progresiva, planificar descansos y respetar las horas de comida.
- Organizar el tiempo libre: Destinar tiempo para actividades deportivas o fines de semana de ocio como recompensa al esfuerzo semanal.
- Planificación de vacaciones: Se sugiere elegir destinos que ofrezcan entretenimiento para toda la familia, garantizando la participación y satisfacción de cada miembro.
- Regreso con anticipación: Volver a la ciudad antes de que concluyan las vacaciones para evitar un impacto brusco en el ritmo de vida.
- Hábitos de vida saludable: La actividad física y una alimentación adecuada ayudan a liberar el estrés acumulado, siendo factores preventivos del síndrome postvacacional.
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- Prioridades y listas: Al reincorporarse a la rutina, es recomendable analizar tareas pendientes, establecer prioridades y evitar abrumarse intentando abordar todo el primer día.
- Actitud positiva: La actitud positiva desempeña un papel fundamental en el proceso de adaptación. En caso de persistir los síntomas, se aconseja buscar la ayuda de un especialista.