Escopolamina, modalidad de robo más temida: ¿cómo actúa esta sustancia en el cuerpo?

La inseguridad en Colombia no cesa, cada vez se conocen más casos de hurto y violencia contra los ciudadanos y asimismo, las diferentes modalidades que van creando los delincuentes para estafar y robar. 

Una de las prácticas más temidas y conocidas es el uso de la escopolamina o burundanga, alcaloide alcaloide natural obtenido de la semilla del borrachero o cacao sabanero.

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Al ser víctima de esta sustancia, los delincuentes pueden hacer de las suyas al inhibir de la voluntad de la persona, robándole todo y dejándolo inconsciente por varias horas. 

¿Qué hace la escopolamina en el cuerpo?

Cuando la escopolamina se absorbe, el ser humano cae en un estado de somnolencia y sumisión profunda. Es decir, al ser víctima de la burundanga, como también es conocida, el cuerpo enfrenta una amnesia lacunar, es decir, la pérdida de la memoria totalmente. 

Generalmente, los sujetos la administran en dulces, chocolates o bebidas como gaseosa, café y licores.

Quien consuma escopolamina, experimentará disminución de la secreción glandular, produciendo sequedad de piel, sed, dificultad para deglutir y hablar, pupilas dilatadas (midriasis) con reacción lenta a la luz y visión borrosa de objetos cercanos.

Según el Instituto Castelao, centro de desintoxicación y tratamiento de adicciones, los síntomas suelen aparecer de una a cuatro horas luego de la intoxicación. De este modo, durante las primeras 12 horas se excreta la mayoría de la droga mediante la orina. 

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Hay casos en los que, debido a altas dosis de escopolamina, puede desencadenar arritmias cardíacas, taquicardia severa, fibrilación, insuficiencia respiratoria, colapso vascular y muerte. 

Hay quienes han sido víctimas de esta droga y aseguran que entran en un estado de pasividad o automatismo, lo que hace que la persona reciba y ejecute órdenes sin oposición. Sin embargo, los delincuentes deben esperar un tiempo a la droga actúe.