César Augusto Londoño, abogado de Juan Carlos Suárez Ortiz, capturado como presunto homicida del universitario de Los Andes, Jaime Esteban Moreno, pidió que su cliente no sea enviado a la cárcel argumentando que no hubo un acuerdo previo para asesinar al joven de 20 años como lo planteó la Fiscalía General.
Para la defensa, en este caso la Fiscalía tenía que hacer una distinción y dejar en claro cuántos golpes, la contundencia y zonas de impacto que recibió el joven y cuál agresor fue el que le propinó cada uno de ellos.
De acuerdo con el abogado Londoño, Juan Carlos Suárez no fue el que le propinó el golpe que le causó la muerte al joven Jaime Esteban Moreno.
“Pero entonces la pregunta es, ¿realmente está acreditado en el dictamen médico legal que concluye que el deceso se produjo como consecuencia de la golpiza?. Esto es importante, su señoría, porque lo que hizo la Fiscalía en su inferencia razonable fue equiparar el impacto de los golpes por igual y la provocación del deceso”, indicó el abogado Londoño.
Así mismo, sostuvo: “Y se dará cuenta, su señoría, de la diferencia de impactos de los golpes, de puños y patadas, de estas dos personas. Por otro lado, no se estableció ni siquiera que estas dos personas anduviesen juntas”.
La defensa solicitó que en caso tal que se le imponga medida de aseguramiento, se le conceda a Juan Carlos Suárez Ortiz, el beneficio de la detención domiciliaria.
Piden cárcel
La Procuraduría General y los representantes civiles de las víctimas respaldaron a la Fiscalía General y se sumaron a la petición a un juez de Bogotá para que sea enviado a la cárcel Juan Carlos Suárez Ortiz como presunto responsable del homicidio del estudiante de 20 años de la Universidad de Los Andes, Jaime Esteban Moreno, quien fue víctima de una golpiza durante la madrugada del 31 de octubre, al salir de una discoteca en Chapinero, nororiente de Bogotá.
El procurador delegado señaló que la Fiscalía logró demostrar con pruebas contundentes que Suárez Ortiz tenía una clara intención de acabar con la vida del universitario Jaime Esteban Moreno y no de causarle sólo unas lesiones.
Claudia Lucía Rodríguez, nueva fiscal de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de Engativá, quien asumió el caso, en reemplazo de Heidy Milena Ruiz debido a los errores y falta de preparación que demostró en la audiencia de imputación, reveló tres testimonios clave y aportó otra serie de pruebas técnicas como videos de las cámaras de seguridad del sector que dejan en evidencia que el ataque fue premeditado por amenazas directas.
“Se tiene la evidencia videográfica y los testimonios recaudados que muestran cómo el ciudadano Juan Carlos Suárez Ortiz, disfrazado con el rostro pintado de color rojo, aprovechó el anonimato que le daba su apariencia para agredir de manera brutal a la víctima, propinándole golpes contundentes con pies y manos, aun cuando ésta nunca respondió la agresión ni ofreció resistencia alguna”, indicó la Fiscal del caso.
Además, según uno de los testigos, una de las mujeres que fueron detenidas en un primer momento acusó sin pruebas al joven Jaime Esteban Moreno de supuestos actos indebidos, y ello habría motivado a Suárez Ortiz, a cometer la brutal agresión con la “clara decisión de causarle la muerte”.
“Tenemos, como ya se ha dicho, que los hechos ocurrieron el 31 de octubre cuando la víctima, un joven universitario que departía con amigos en un establecimiento abierto público, fue acusado por una mujer de estar realizando presuntos actos indebidos, el señalamiento sin que mediara verificación ni defensa alguna, provocó que dos hombres, entre ellos el imputado, lo persiguieran violentamente fuera del establecimiento”, relató la Fiscal.
Sin embargo, la Fiscal delegada fue enfática en señalar que además de no existir una sola evidencia de dicha actuación atribuida a la víctima, nada justificaba la extrema violencia con la que fue asesinado el universitario Jaime Esteban Moreno.
“La comunidad entera percibe este hecho como una afrenta al valor de la vida, un mensaje doloroso de que la intolerancia y la ira momentánea pueden destruir familias enteras. Por todo lo anterior, señor juez, es que la Fiscalía considera que efectivamente aquí se tiene dada la gravedad que es eminentemente dolosa, dolo directo, con clara y contundente intención de matar”, indicó la Fiscal delegada.
“Se advierte, señor juez, que el ataque no fue producto de una reacción momentánea ni de un impulso aislado. Por el contrario, el comportamiento del imputado revela una clara decisión de causar la muerte, pues después de propinarle los primeros golpes y retirarse del lugar al observar que su acompañante continuaba atacando al joven, se devolvió para rematar la agresión, asestando nuevas patadas contra la víctima que yacía en el suelo sin posibilidad alguna de defenderse”, dijo la funcionaria judicial.
¿Que pasó con los otros involucrados?
Cabe señalar que las dos mujeres detenidas junto a Suárez Ortiz, identificadas como Bertha Parra y Paola Fernández, de origen venezolano, fueron dejadas en libertad, al no encontrarse elementos suficientes para imputarles cargos.
Por estos hechos, las autoridades intensificaron la búsqueda de un segundo sospechoso, identificado como Ricardo González, de 22 años y oriundo de Cartagena, quien se encuentra prófugo de la justicia.
De acuerdo con las pesquisas, González fue captado en cámaras de seguridad del Before Club, donde se le observa con un disfraz de orejas negras de conejo, la noche del ataque que terminó con la vida de Jaime Esteban Moreno.
El Juez 37 de control de garantías de Bogotá definirá si acoge la petición de la Fiscalía, Procuraduría y de los abogados de las víctimas y lo envía a la cárcel como el presunto asesino del joven Jaime Esteban Moreno.