Con un tono optimista y en medio de crecientes dudas sobre la economía, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se dirigió al país en un discurso televisado con el que buscó recuperar la confianza de los estadounidenses. El mandatario aseguró que su gobierno está “doblando la esquina” tras un año de incertidumbre y prometió que “lo mejor está por llegar”, mientras defendió decisiones polémicas de su administración, entre ellas el endurecimiento del cerco contra Venezuela.
Desde la base aérea Andrews, en las afueras de Washington, el mandatario aseguró que su administración no permitirá el paso de embarcaciones que, según su criterio, operen de manera ilegal o atenten contra los intereses estadounidenses.
“Nos quitaron nuestro petróleo y lo queremos de vuelta”
Trump insistió en que Venezuela habría despojado a empresas estadounidenses de sus derechos sobre recursos energéticos, una acusación que ha reiterado en distintos escenarios.
“Nos arrebataron todos nuestros derechos energéticos, nos quitaron nuestro petróleo hace no mucho tiempo y lo hicieron de forma ilegal. Lo queremos de vuelta”, afirmó ante periodistas, al tiempo que justificó el bloqueo como una respuesta directa a ese supuesto despojo.
Según el jefe de la Casa Blanca, la medida busca impedir que continúe lo que califica como el “robo de activos estadounidenses”, argumento que su gobierno ha utilizado para endurecer las sanciones contra el régimen de Nicolás Maduro.
Bloqueo total y mensaje directo desde Truth Social
La orden presidencial fue anunciada inicialmente a través de Truth Social, la red social del propio Trump, donde publicó un extenso mensaje cargado de advertencias contra Caracas.
En esa plataforma, el mandatario aseguró que Venezuela se encuentra “rodeada por la mayor armada jamás reunida en la historia de Sudamérica” y advirtió que la presión se mantendrá —e incluso aumentará— hasta que el país “devuelva todo el petróleo, las tierras y otros activos que fueron robados”.
Trump también volvió a señalar a Maduro como cabecilla del denominado Cartel de los Soles, una acusación que su administración ha usado para vincular al gobierno venezolano con narcotráfico y terrorismo.
Venezuela, señalada como organización terrorista extranjera
Un día antes del anuncio del bloqueo, Trump explicó que la decisión se sustenta no solo en razones económicas, sino también en acusaciones de terrorismo, narcotráfico y trata de personas. Bajo ese argumento, su gobierno ha catalogado al régimen venezolano como una organización terrorista extranjera, una designación que agrava aún más el aislamiento internacional de Caracas.
“Por todo esto, ordeno un bloqueo total y completo de todos los petroleros sancionados que entren o salgan de Venezuela”, afirmó el mandatario, reforzando el tono confrontacional de su política exterior.
“Estados Unidos creó la industria petrolera venezolana”
El subjefe de gabinete de la Casa Blanca, Stephen Miller, respaldó la postura de Trump y fue aún más lejos al afirmar que Estados Unidos fue clave en el desarrollo del sector petrolero venezolano.
Según Miller, la nacionalización de la industria representó “el mayor robo de riqueza y propiedad estadounidense jamás registrado”, una declaración que refuerza la narrativa del actual gobierno sobre la necesidad de recuperar esos activos.