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Erin podría convertirse en el primer huracán de la temporada en el Atlántico

Tormenta tropical Erin avanza hacia el Caribe con posibilidad de convertirse en el primer huracán del año.

Publicado:
Actualizado:
Viernes, Agosto 15, 2025 - 09:15
Erin se dirige hacia el Atlántico
Erin se dirige hacia el Atlántico
Servicio Meteorológico Nacional de EE.UU.

Con el Atlántico en su temperatura más alta para esta época del año y en pleno pico de la temporada de huracanes, la tormenta tropical Erin avanza hacia el Caribe con posibilidades de transformarse en el primer huracán de 2025. Los meteorólogos advierten que sus vientos sostenidos podrían superar las 74 millas por hora en las próximas horas, aunque aún es pronto para definir su impacto en tierra firme.

El Centro Nacional de Huracanes ha instado a las comunidades de la costa este de Estados Unidos a revisar sus planes de emergencia. “Este es el momento de estar preparados, no cuando ya haya una advertencia oficial”, señaló la administradora interina de la NOAA, Laura Grimm.

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La actual temporada, que se extiende del 1 de junio al 30 de noviembre, podría ser más activa de lo habitual: se prevén hasta 18 tormentas con nombre y cinco huracanes intensos, cifras por encima del promedio histórico de 14 tormentas. Esta proyección se debe a una combinación de factores, incluido el regreso a condiciones neutras de El Niño y la persistencia de aguas oceánicas por encima de la media, que sirven de combustible para los ciclones tropicales.

El aumento de la temperatura del mar no solo acelera la formación de tormentas, sino que puede intensificarlas rápidamente. Kerry Emanuel, profesor emérito del MIT, recuerda que “por cada grado centígrado que se calienta el océano, la velocidad del viento de un huracán puede incrementarse entre un 5 % y un 7 %”. El cambio climático también eleva el nivel del mar y la humedad atmosférica, aumentando el riesgo de marejadas ciclónicas e inundaciones extremas, incluso en zonas alejadas de la costa.

La historia reciente demuestra que no hace falta que una tormenta alcance categoría de huracán para ser letal. El mes pasado, los restos de la tormenta tropical Barry quedaron estacionados sobre Texas, donde interactuaron con otro sistema meteorológico y provocaron lluvias torrenciales que dejaron víctimas mortales.

Aunque los sistemas de pronóstico han mejorado notablemente —con modelos como el Sistema de Análisis y Pronóstico de Huracanes, capaz de anticipar la rápida intensificación de ciclones como Helene y Milton—, la NOAA enfrenta recortes presupuestarios impulsados por la administración Trump que amenazan con limitar su capacidad de respuesta. Estos recortes han afectado divisiones clave, reducido personal especializado y mermado herramientas como el lanzamiento de globos meteorológicos.

En opinión de expertos que hablaron con el medio Vox, Erin será una prueba decisiva para medir si estas limitaciones se traducen en retrasos o fallos de alerta. Con más del 40 % de la población estadounidense viviendo en zonas costeras y más de dos meses de temporada por delante, la administración Trump estará a prueba.

Fuente:
Sistema Integrado de Información