La expropiación se convirtió en una de las palabras más repetidas en el debate político y económico venezolano durante las últimas dos décadas. Esta figura tomó fuerza a partir del gobierno del fallecido expresidente Hugo Chávez, quien la promovió como una herramienta para fortalecer el control estatal sobre sectores estratégicos de la economía.
Con el paso de los años, esta política dejó profundas consecuencias que hoy siguen siendo visibles: caída de la inversión privada, salida de capitales extranjeros y debilitamiento del aparato productivo, factores que contribuyeron al colapso económico del país.
¿Cómo funcionó la política de expropiaciones?
Bajo el discurso de proteger la soberanía nacional, el Gobierno venezolano avanzó en la toma de empresas nacionales y extranjeras, argumentando que estas representaban un riesgo para los intereses del Estado.
Sin embargo, la reiteración de estas medidas generó un efecto contrario al esperado. Empresas privadas comenzaron a retirar sus inversiones, anticipando posibles confiscaciones, lo que aceleró el deterioro del sector productivo y redujo casi por completo la llegada de capital extranjero.

Durante los primeros años, la política de expropiaciones estuvo respaldada por la bonanza petrolera, lo que permitió al Estado sostener un aparato público cada vez más amplio. No obstante, cuando los precios del crudo comenzaron a caer y se evidenciaron fallas estructurales en los modelos de producción, los efectos negativos salieron a la luz.
Entre las principales consecuencias se destacan:
- Desabastecimiento en sectores clave
- Paralización de industrias estratégicas
- Deterioro de servicios públicos
- Incremento de la corrupción y mala gestión administrativa
Según cifras de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), entre 2002 y 2012 se concentró la mayor parte de los procesos de nacionalización y expropiación.
En ese periodo, al menos 1.168 empresas pasaron a manos del Estado, afectando sectores como alimentos, energía, telecomunicaciones, banca, industria, comercio y medios de comunicación.
Tensiones con Estados Unidos y el petróleo en el centro del conflicto
El tema de las expropiaciones volvió a tomar relevancia internacional tras decisiones del entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien bloqueó la circulación de barcos petroleros sancionados que transportaran crudo venezolano.
Desde Washington, se acusó al Gobierno venezolano de apropiarse de activos y yacimientos petroleros pertenecientes a empresas estadounidenses, en clara referencia a las expropiaciones ejecutadas durante la era Chávez.
El economista José Ignacio Hernández, experto sénior de Aurora Macro Strategies, aseguró recientemente a CNN que Venezuela mantiene una deuda cercana a 12.000 millones de dólares con Estados Unidos por expropiaciones consideradas arbitrarias a compañías norteamericanas.
Este panorama ha dificultado cualquier intento de normalizar relaciones comerciales o atraer nueva inversión extranjera.

Empresas que ha expropiado el Gobierno de Venezuela
La lista de empresas expropiadas en Venezuela abarca múltiples sectores:
Industria, alimentos y comercio
- Cargill
- Lácteos Los Andes
- Coca-Cola FEMSA
- Agroisleña
- Monaca-Gruma
- Supermercados Éxito
- Supermercados CADA
Energía y petróleo
- Exxon Mobil
- ConocoPhillips
- Helmerich & Payne
- Más de 60 empresas petroleras
- Yacimientos de petróleo, gas y oro
Hoteles y servicios
- Hotel Hilton Caracas
- Hotel Hilton Margarita
- Complejos hoteleros
Telecomunicaciones y servicios públicos
- CANTV
- Electricidad de Caracas
Industria pesada y construcción
- SIDOR
- SIDETUR
- Cementos de Venezuela
- Lafarge
- Holcim
- Cemex
Medios de comunicación
- Televisoras cerradas como RCTV
- Bloqueo de canales internacionales como CNN en Español, Caracol, RCN, BBC World, DW y Antena 3, entre otros