Las naves mellizas Voyager, denominadas 1 y 2, fueron lanzadas por la Nasa en 1997 con una sola misión: recolectar información sobre los gigantes del sistema solar. Ambos satélites cumplieron su misión y recopilaron información sobre Júpiter y Saturno, algo que les permitió a los científicos y físicos aprender más sobre estos dos planetas.
Sin embargo, las naves espaciales siguieron intercambiando información con la Nasa y desde entonces, tanto Voyager 1, como Voyager 2, han recolectado datos del espacio. De hecho, han llegado más lejos que cualquier otro objeto humano en el espacio.
En cuanto al viajero 1, ha logrado llegar más lejos que su hermano, pese a que despegó luego que este, y está a punto de perder total conexión con el planeta Tierra. Esto se debe a que tomó una ruta que le permitió adquirir mayor velocidad y tomar un rumbo desconocido que le ha permitido a los científicos descubrir datos que antes eran un secreto par la humanidad.
Esta nave en 2026 alcanzará un día-luz de distancia con respecto a la tierra y en 2012 salió de la heliosfera; es decir, donde la fuerza del sol ya no tiene más fuerza que otras fuerzas en el espacio sideral.

Una extraña región en el espacio: el "muro de fuego"
Ambos viajeros capturaron postales de diferentes planetas, asteroides y estrellas. Pero algunos instrumentos detectaron condiciones que se consideraron extrañas en una parte del espacio, no muy lejos de nuestro sistema solar.
Se trata de una región que fue apodada como el "muro de fuego", que se encuentra a decenas de miles de grados centígrados.
De acuerdo con las sondas enviadas por los voyager, las temperaturas en esta zona del espacio rondan entre los 30.000 y 50.000 grados kelvin. Pero esta zona no fue un reto para las máquinas enviadas por la humanidad, que la recorrieron sin inconvenientes.
La Nasa confirmó que se realizarán estudios a esta zona del espacio cercano, por medio de una misión independiente, llamada IMAP, que permitirá obtener datos y aclarar el origen de la barrera electromagnética.
El "muro de fuego" representa el límite de la heliosfera. La misión IMAP además, tendrá la misión de buscar más información sobre el sol y deberá recolectar información para establecer la composición del entorno espacial.

¿Dónde se ubica el muro de fuego?
En el borde del sistema solar, que se define como heliosfera; lugar en el que las fuerzas del sol se hacen débiles y se encuentra con vientos interestelares. Como efecto de este choque se genera este campo de altas temperaturas, determinadas como "burbujas gigantes" que protegen al sistema solar de la radiación interestelar.
La Nasa publicó al respecto información que explica este fenómeno natural: "El sol envía un flujo constante de partículas cargadas llamado viento solas, que viaja más allá de todos los planetas hasta unas tres veces la distancia a Plutón antes de ser impedido por el medio interestelar".
Con respecto a las "burbujas", indicó que se trata de un "equilibrio de presión que hace que el viento solar retroceda y fluya por la cola de la heliosfera".