El gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, entregó detalles sobre el balance de movilidad y algunas medidas para el primer plan retorno de estas festividades en el departamento.
Según el jefe departamental, desde el pasado 24 de diciembre han ingresado cerca de 1.405.821 vehículos por los principales corredores departamentales.
Un gran flujo vehicular que viene acompañado de más de 350 policías de carretera, 700 soldados de la Brigada 13 y 35 agentes de tránsito, quienes custodian todo el recorrido en materia de seguridad vial.
Sin embargo, según las autoridades de Tránsito y Transporte, hasta la fecha se han reportado 12 siniestros viales, con cinco personas fallecidas, entre ellas cuatro motociclistas y un peatón.
Debe destacarse que, para el control del tráfico al inicio del primer plan retorno de estas festividades, se han efectuado monitoreos permanentes mediante drones en los siguientes puntos:
*Peaje El Roble – El Sisga.
*Corredor Anapoima – La Gran Vía.
*Casco urbano de Soacha.
“Este monitoreo nos permite apoyar la gestión del tráfico y la atención en vía. (...) Esperamos que hayan disfrutado unas vacaciones en familia. Manejen con precaución y regresen con tranquilidad”, indicó el gobernador Jorge Emilio Rey.
Por otro lado, en medio de las obras de las fases 2 y 3 de TransMilenio en la Autopista Sur, la Agencia Regional de Movilidad (ARM) entregó 750 conos viales y otros elementos de señalización, de cara al plan éxodo y retorno de fin de año por la Autopista Sur.
Tensión
Crece la expectativa sobre la fecha de implementación del pico y placa para vehículos particulares que no estén matriculados en la capital del país dos sábados al mes, luego del anuncio que hizo hace varias semanas el alcalde de la capital de país, Carlos Fernando Galán.
El funcionario reconoció que tanto el alcalde de Soacha, Julián Sánchez 'Perico', como otros mandatarios locales, han manifestado abiertamente su desacuerdo sobre la medida, enfatizó que el camino para resolver estas diferencias es la creación de una "mesa completa" de trabajo.
De acuerdo con Galán, la restricción vehicular no debe verse de forma aislada, sino como parte de un ecosistema complejo de relaciones entre Bogotá y la región.
Dijo que el objetivo es establecer un espacio de concertación que no solo discuta el tránsito, sino también el equilibrio financiero y recursos comunes necesarios para sostener la infraestructura compartida.