Por orden de la Fiscalía General de la Nación un grupo especial de agentes del CTI adelantan una inspección judicial a la sede del Comando de Personal del Ejército Nacional e Indumil, dentro de las investigaciones que se siguen por el escándalo relacionado con la información extraída de los computadores y otros dispositivos incautados al frente 36 de las disidencias de las Farc que lidera Alexander Díaz Mendoza, alias Calarcá.
Esta diligencia fue ordenada porun fiscal delegado ante la Corte Suprema de Justicia con el objetivo de recolectar la mayor cantidad de elementos materiales de prueba y así impulsar las investigaciones que se llevan a cabo contra los funcionarios y otros involucrados con supuestos nexos con esta estructura de las disidencias de las Farc.
Esta inspección se suma a las labores de verificación y análisis practicadas por el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía a los computadores, teléfonos, discos duros, memorias y otros dispositivos electrónicos que fueron decomisados en el retén militar del 23 de julio de 2024 en Anorí (Antioquia), a una caravana de integrantes del autodenominado Estado Mayor de bloques y frentes de las disidencias de las FARC, en la que transitaba alias Calarcá.
Además de Alexander Díaz Mendoza, alias Calarcá, la caravana delEstado Mayor de bloques y frentes de las disidencias de las FARC que fue interceptada en un reten militar estaba integradapor Erlinson Echavarría Escobar, Juan Antonio Agudelo Salazar, Diana Carolina Rey Rodríguez, María Alejandra Ojeda Londoño, Wenser Yosony Sábana Duque, alias Oliver y Édgar de Jesús Ortega, alias Firu.
El papel del general Juan Miguel Huertas Herrera
Tras compulsa de copias la fiscalía delegada ante la Corte Suprema investiga la conducta del general del Ejército, Juan Miguel Huertas Herrera, jefe del comando personal (Coper), quien se encuentra en el centro de la controversia por presuntos vínculos con las disidencias de las Farc, luego de que su nombre apareciera en los archivos secretos de supuestos miembros de la estructura de alias Calarcá.
Uno de los principales fines de esta indagación es lograr detectar y recopilar evidencias que conduzcan a determinar si existen méritos para acudir ante los jueces y formular una eventual imputación de cargos contra el general Huertas Herrera en el marco de este escándalo.
El funcionario del DNI
De igual, forma, se indagan entre otros funcionarios, la posible responsabilidad del director de Inteligencia estratégica de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), Wilmar de Jesús Mejía.
Ambos funcionariosaparecen referenciados en distintas comunicaciones internas detectadas a las disidencias de las Farc como presuntos facilitadores de contactos, movilidad y proyectos para crear una empresa de seguridad con la cual esa estructura armada buscaba amparar armas, hombres y vehículos blindados.
Así mismo, se tiene prevista otra serie de práctica de pruebas para avanzar en las indagaciones sobre las presuntas infiltraciones de las disidencias de Las Farc al Ejército Nacional y a la Dirección Nacional de Inteligencia e incluso financiación de la campaña a la presidencia.
Este equipo especial lleva a cabo un trabajo conjunto con la Unidad delegada contra el Crimen Organizado de la Fiscalía, ante la información de la mayor gravedad extraida de los dispositivos electrónicos que hace año y cuatro meses le decomisaron a alias Calarcá.
En desarrollo de estas diligencias los fiscales también indagan las amenazas a la seguridad nacional, alianzas entre distintos actores ilegales y creación de empresas de vigilancia al servicio de estructuras criminales.