Más de 800 vuelos fueron cancelados en Estados Unidos hasta las 4:30 a.m. del viernes, una cifra cuatro veces superior a la registrada el día anterior, según datos del sitio de seguimiento FlightAware.
La medida ocurre tras una orden de emergencia de la Administración Federal de Aviación (FAA) que redujo el número de vuelos en 40 aeropuertos del país, en respuesta al impacto del cierre del Gobierno federal.
Este jueves se habían contabilizado 201 cancelaciones, muy por debajo de los 340 vuelos cancelados en promedio cada día durante el año pasado.
Sin embargo, los recortes ordenados por la FAA podrían provocar una nueva oleada de cancelaciones durante el fin de semana, mientras las aerolíneas ajustan sus horarios ante la falta de personal de control aéreo.
La FAA anunció una reducción del 4 % de los vuelos programados a partir de este viernes en los principales aeropuertos estadounidenses, con una advertencia clara: el recorte aumentará al 10 % la próxima semana si el cierre del Gobierno continúa.
La decisión afecta terminales clave en todas las regiones del país, desde Boston, Nueva York y Filadelfia en el noreste, hasta Los Ángeles, San Francisco y Seattle en la costa oeste, pasando por los grandes centros de conexión de Chicago, Atlanta, Dallas, Houston y Miami. También están incluidas instalaciones en Anchorage y Honolulu.
Entre las aerolíneas, SkyWest —la mayor compañía regional del país— lideró las cancelaciones con 172 vuelos suspendidos, equivalentes al 6 % de su operación total del día.
En segundo lugar se ubicó Southwest Airlines, con 121 cancelaciones, seguida por Republic (83 vuelos cancelados) y Endeavor Air, filial regional de Delta, con 80.
El director ejecutivo de United Airlines, Scott Kirby, anticipó que las reducciones afectarían principalmente las rutas regionales y los vuelos domésticos de larga distancia.
“Centraremos la reducción de nuestros horarios en los vuelos regionales y los vuelos nacionales de larga distancia que no conectan nuestros hubs”, señaló.
En cuanto a los aeropuertos más golpeados, Chicago O’Hare encabezó la lista con 40 cancelaciones, seguido por el Hartsfield-Jackson de Atlanta con 38.
En promedio, los aeropuertos afectados cancelaron alrededor del 3 % de sus vuelos diarios, aunque las autoridades no prevén un aumento significativo a lo largo del día.
El secretario de Transporte, Sean Duffy, vinculó directamente la reducción de vuelos con el cierre del Gobierno. “Si alguien quiere cuestionarnos, le respondo: ¡Abran el Gobierno!”, dijo Duffy en una entrevista con CBS News. “Tenemos que tomar medidas sin precedentes porque nos encontramos en una situación sin precedentes con el cierre”.
El funcionario explicó que la falta de pago a los controladores aéreos ha derivado en ausencias y sobrecarga laboral entre el personal operativo.
“Vimos controladores trabajando seis días a la semana, jornadas de 10 horas”, detalló. “Esa presión nos estaba dando cifras preocupantes, por lo que mi trabajo es ser proactivo”.
Por su parte, el congresista demócrata Rick Larsen, miembro de la Comisión de Transporte de la Cámara de Representantes, pidió “más transparencia” sobre las medidas de la FAA. No obstante, Duffy insistió en que la prioridad es la seguridad aérea.
“Estoy tratando de llevar a la gente adonde quiere ir y que lleguen allí de forma segura”, afirmó.