El reconocido streamer Ibai Llanos visitó recientemente Colombia y, durante su paso por Medellín, llegó hasta la casa del cantante J Balvin, ubicada en una zona montañosa de la ciudad. El encuentro quedó registrado en una conversación extensa en la que ambos recorrieron la vivienda y abordaron temas personales y profesionales del artista.
La casa está rodeada de naturaleza y alejada del entorno urbano. Al recibir a su invitado, J Balvin explicó que el lugar no está vinculado a su actividad musical. “Aquí no hay nada que tenga que ver relacionado con música, aquí es solamente conexión”, señaló. Antes de ingresar, el cantante pidió a Ibai que se quitara los zapatos y usara calzado de descanso, una práctica que asoció con costumbres asiáticas.
Casa de J Balvin en Medellín

Durante el recorrido inicial, Ibai destacó la ubicación de la vivienda y el entorno natural que la rodea. “Estamos a 2.200 metros de altura”, comentó, mientras observaba el paisaje montañoso. J Balvin explicó que eligió este lugar para mantener distancia de la rutina laboral y de los estudios de grabación.
El interior cuenta con amplios espacios, cocina principal y una segunda cocina auxiliar, zonas sociales y habitaciones para visitas. “La vida aquí es muy descomplicada, siempre terminamos en la cocina”, afirmó el artista durante la conversación.
Familia y vida cotidiana
Uno de los espacios visitados fue el cuarto de su hijo. J Balvin habló sobre la relación con su familia y la manera en que su hijo percibe su trabajo. “Él dice que yo trabajo para JB”, contó. El cantante señaló que su agenda de viajes es exigente, pero que procura compartir tiempo con su hijo y su esposa cuando se encuentra en casa.
En la habitación principal, Ibai observó que el dormitorio integra un gimnasio, sauna y baño amplio con vista exterior. “Este es el camino de la paz”, expresó J Balvin al mostrar uno de los recorridos internos de la vivienda, resaltando que la arquitectura cambia según la luz del día y la iluminación nocturna.
Espacios exteriores y naturaleza

En el exterior, la casa cuenta con una piscina–jacuzzi, una fogata y zonas destinadas al descanso. También se destaca una cancha de baloncesto con medidas profesionales, ubicada en medio del paisaje natural. “Aquí se puede jugar un cinco contra cinco de verdad”, comentó Ibai durante el recorrido.
Otro de los elementos centrales es un bonsái traído desde Japón, visible desde distintos puntos de la casa y desde el exterior. “Mira el tamaño de ese bonsái, es otra cosa”, explicó J Balvin al referirse a la pieza, que forma parte del diseño arquitectónico del lugar.
Reflexiones sobre carrera y expectativas
En distintos momentos de la conversación, J Balvin habló sobre su presente personal y profesional. Se refirió a la presión que experimentó en años anteriores y a cómo cambió su relación con el éxito. “Mi lucha ya no es ser número uno, mi lucha es tener paz”, afirmó.
El artista también abordó su visión sobre el éxito de otros colegas. “Hoy puedo celebrar lo que pasa con Benito”, dijo, al explicar que ahora observa la industria desde una perspectiva distinta, con menos expectativas y mayor tranquilidad.
El recorrido continuó en uno de los miradores de la casa, un espacio que el equipo bautizó como “Debí tirar más fotos” por su similitud con una portada musical. Posteriormente, Ibai Llanos y J Balvin se encontraron con la visita de Ryan Castro y todos juntos se dirigieron a la cancha de baloncesto, donde compartieron un momento de tiros libres, antes de retomar la conversación y finalizar la visita por la vivienda.