En Colombia, los puentes festivos son sinónimo de descanso, familia y pequeñas escapadas que permiten desconectarse de la rutina sin recorrer grandes distancias. Son momentos esperados para disfrutar del país, aprovechar sus paisajes y renovar energías antes de volver al trabajo o al estudio.
Noviembre trae consigo dos fines de semana largos: el del lunes 3, en conmemoración del Día de Todos los Santos, y el del lunes 17, cuando se celebra la Independencia de Cartagena. Aunque muchos prefieren quedarse en Bogotá, la ciudad y sus alrededores ofrecen una variedad de planes para disfrutar sin necesidad de viajar lejos ni gastar demasiado.
Desde caminatas ecológicas y festivales culturales hasta días de sol junto a la piscina, las opciones son amplias para quienes buscan relajarse o vivir nuevas experiencias. Para los que anhelan un clima más cálido y un chapuzón refrescante, existen destinos cercanos ideales para un viaje corto por carretera. A continuación, le dejamos cinco lugares perfectos para ‘piscinear’ cerca de Bogotá y aprovechar al máximo los próximos puentes festivos.

Anapoima
A solo dos horas de Bogotá, por la vía a La Mesa, se encuentra uno de los destinos favoritos de los capitalinos: Anapoima. Su clima cálido, entre 25 y 28 °C, y su ambiente tranquilo lo convierten en el lugar perfecto para descansar. Además, ofrece hoteles y casas de descanso con piscina, ideales para disfrutar en familia.

Este pueblo es un refugio natural donde se puede practicar ciclopaseo, caminatas ecológicas, barranquismo o recorridos en cuatrimoto. Es el destino ideal para quienes buscan aventura y desconexión sin alejarse demasiado de la ciudad.
Según la Alcaldía del municipio, los visitantes pueden subir al cerro Cristo Rey, disfrutar de los baños medicinales Santa Lucía o visitar el Salto del Caiquero, una cascada perfecta para relajarse.
Villeta
Conocida como la capital de la panela, este pueblo se ubica a poco más de dos horas de Bogotá y es ideal para quienes buscan un clima cálido y seco.
Es un destino perfecto para explorar la tradición panelera y conocer de cerca el proceso de la caña de azúcar en sus fincas locales. También se puede disfrutar del famoso Salto de los Micos, una montaña reconocida por “sus siete cascadas que corren a través de las altas piedras”, explica la alcaldía local.
Las fincas de recreo en Villeta son una excelente opción para descansar, disfrutar del sol y la piscina. Si busca un plan más natural, además del Salto de los Micos, vale la pena visitar la Bocatoma de Bagazal, una caída de agua artificial de más de 30 metros, muy popular para el paseo de olla; la laguna Larga o el camino real Villeta-Guaduas, un sendero histórico que existe desde épocas precolombinas.
La Mesa

A solo hora y media de Bogotá, La Mesa es perfecta para quienes buscan descansar sin ir muy lejos. Con un clima templado entre los 20 y 27 °C, ofrece fincas con piscina y espacios verdes perfectos para relajarse, además de actividades como caminatas ecológicas y avistamiento de aves.
Muy cerca se encuentra la Laguna de Pedro Palo, entre Tena y La Mesa, a 2.000 metros de altura. Con 27 metros de profundidad y 14 °C de temperatura, es la mayor reserva hídrica de la región. Los muiscas la llamaban Tenasuca o “laguna de las tristezas”, por su neblina constante y la leyenda de una princesa castigada, que la convierte en un lugar místico y sagrado.
Apulo

A tan solo dos horas y media de Bogotá, Apulo se presenta como un refugio perfecto para desconectarse del ruido de la ciudad. Este pequeño y acogedor municipio ofrece una amplia oferta de hoteles campestres con piscinas naturales y recorridos ecológicos que invitan al descanso y la tranquilidad, ideales para quienes buscan un respiro entre montañas y naturaleza.
En Apulo, las opciones se adaptan a todos los gustos: desde la aventura de visitar la cascada de La Chorrera o la Laguna Salcedo, practicar senderismo, cabalgatas o rafting, hasta el relax en spas y piscinas termales. Además, el Club Campestre El Peñón ofrece golf y tenis, mientras que el centro histórico y los parques recreativos le permitirán saborear la gastronomía local y disfrutar de un ambiente familiar con el encanto típico de los pueblos cundinamarqueses.
Melgar
A solo tres horas de Bogotá, este destino es reconocido por su ambiente vacacional y su amplia oferta hotelera que incluye parques acuáticos, toboganes y una variada zona comercial. Es ideal para quienes buscan descanso en familia, pero también ofrece una animada vida nocturna con sitios de rumba perfectos para disfrutar con amigos o en pareja.
Con una temperatura promedio de 30 grados, esta población cercana a la capital es un paraíso para quienes buscan sol, balnearios y cascadas naturales. Además, cuenta con atractivos ecológicos como el Parque Ecológico Ciudad Reptilia, donde se conservan especies de reptiles en peligro, y senderos que recorren el Bosque Húmedo Tropical, ideales para conectar con la naturaleza, según destaca Colombia Travel.