Cinco años del descalabro de Interbolsa

Fue un 'tsunami' financiero que copó los titulares de la prensa por el impacto y el volumen de los recursos invertidos por parte de los socios y quienes pusieron en muchos casos sus ahorros para ganar en el mercado bursátil.

Según estimativos de las autoridades, por Interbolsa se perdieron más de $300.000 millones, una cifra inferior a escándalos como los de las libranzas (cerca de 1 billón) pero suficiente para que los medios pusieran sus ojos en este capítulo de corrupción y maniobras ilegales.

Esta comisionista manejaba una tercera parte de las operaciones bursátiles del país.

El escándalo se destapó tras conocerse la crisis de liquidez de Interbolsa, cristalizada en parte por un impago al banco BBVA, por $30.000 millones, así como algunas maniobras riesgosas en operaciones por parte de los directivos de la firma sobre acciones como las de Fabricato.

Por cuenta de este escándalo el país comenzó a escuchar nombres como los de Tomás Jaramillo, Rodrigo Jaramillo, Juan Carlos Ortíz, Alessandro Corridori y Víctor Maldonado, estos últimos vinculados también al capítulo del Fondo Premium.

Un escándalo con final algo feliz, luego de que el pasado 30 de agosto, el superintendente de Sociedades, Francisco Reyes, informara el fin de la liquidación del Fondo Premium y la recuperación de bienes por $385.000 millones.

En aquel entonces el funcionario señaló que “este es el caso más exitoso que tenemos hasta ahora en esta materia teniendo en cuenta la complejidad, el monto de los recursos comprometidos, las instancias procesales, las acciones de tutela interpuestas y el embargo de activos. No tiene precedentes en el país”.

Entre tanto, de la Sociedad Comisionista InterBolsa, que a la postre fue liquidada por Fogafín, quedaron alrederdor de 300 víctimas, las cuáles reclamaron $254.000 millones. No obstante, solo fueron recuperados en este proceso $65.000 millones.

Las principales cabezas de este descalabro fueron condenadas por la justicia. En el caso de Tomás Jaramillo, hijo del presidente de la holding y uno de los cerebros del descalabro, tendrá que pagar 5 años de prisión, en la cárcel La Picota.

En cuanto a Juan Carlos Ortíz, otro de los implicados en el Fondo Premium, le fue impuesta una pena de 5 años, entre tanto, Alessandro Corridori fue dejado en libertad por vencimiento de términos.