El sector del transporte de carga expresó su preocupación por la situación de orden público que afecta las carreteras del país, tras el bloqueo armado que adelanta la guerrilla del ELN.
Según la Federación de Transportadores de Carga (Fedetranscarga), esas acciones tienen el objetivo de suspender la actividad del sector y limitar la movilidad en diferentes regiones del territorio nacional.
El gremio advirtió que esta coyuntura impacta directamente la cadena logística del país, un componente clave para la estabilidad económica y el abastecimiento de productos. Agregaron que la afectación se presenta en un periodo de alta demanda comercial, lo que incrementa la preocupación por posibles interrupciones en la distribución de mercancías hacia los hogares colombianos.
Afectaciones reportadas en distintas regiones
Desde el inicio del bloqueo armado se han registrado al menos 13 hechos que afectan la seguridad y la movilidad, de acuerdo con la información recopilada por el gremio transportador. Estos eventos incluyen bloqueos, ataques a infraestructura y actos violentos contra personas vinculadas a la atención de emergencias y al tránsito vial.
Entre los hechos mencionados se encuentran bloqueos que dificultan el paso de vehículos en el municipio de Pelaya y Curumaní (Cesar). Esas situaciones han generado restricciones al tránsito y riesgos para quienes se movilizan por estos corredores.
La federación también da cuenta de atentados contra infraestructura vial, como la destrucción del peaje La Lizama (Santander) mediante un artefacto explosivo y que dejó dos personas heridas.
A esto se suma el asesinato de un conductor de ambulancia en el departamento de Santander, un episodio que incrementó la alerta sobre los riesgos para civiles y trabajadores que circulan por las carreteras.
Otro de los eventos reportados fue el cierre total del sector de San Roque, en Curumaní (Cesar), tras la verificación de la presencia de dos contenedores con artefactos explosivos improvisados. Este cierre obligó a suspender completamente la circulación en ese punto, afectando la continuidad del transporte en la zona.
Riesgos en los corredores viales
La situación de seguridad se agrava con el anuncio del grupo armado de considerar objetivos militares a instalaciones y vehículos de las Fuerzas Armadas, lo que según el gremio, incrementa el nivel de riesgo en los corredores viales del país. Esta circunstancia expone no solo a las Fuerzas Militares, sino también a transportadores, pasajeros y población civil que transita por las vías nacionales.
La federación señaló que este escenario pone en peligro la vida de los conductores de carga y compromete la operación normal del servicio de transporte, considerado esencial para el funcionamiento del país.
Ante la coyuntura de orden público, el gremio hizo un llamado a las autoridades nacionales para que se adopten medidas que permitan recuperar el control de las carreteras. Enfatizaron en la necesidad de acciones inmediatas por parte del Gobierno Nacional, así como de las entidades responsables de la seguridad y el orden interno.
Asimismo, se solicitó fortalecer la presencia del Ejército y la Policía en los principales corredores viales, con el fin de garantizar condiciones de seguridad tanto para la población civil como para los transportadores, sus vehículos y las mercancías que movilizan.
Impacto en el abastecimiento y la actividad económica
Fedetranscarga señaló que el transporte de carga es un eslabón fundamental para el bienestar nacional y que cualquier interrupción prolongada de esta actividad puede generar afectaciones significativas para la sociedad. La seguridad en las vías es presentada como un factor determinante para asegurar el abastecimiento y la continuidad de las actividades productivas en el país.