Madre de soldado quemado en Putumayo envía mensaje de perdón y confía en la justicia divina

El pasado miércoles 3 de septiembre se registró un ataque, por parte de productores de cocaína, a tres soldados profesionales en la zona rural del municipio de Villa Garzón, Putumayo, quienes rociaron con gasolina y prendieron fuego a los mismos, resultando gravemente heridos.

Yolanda Amaya, madre de Sebastián Díaz Amaya, uno de los uniformados heridos, entregó un doloroso testimonio sobre cómo vive esta situación que tiene a su hijo en delicado estado de salud en el hospital Militar Central de Bogotá, con quemaduras en el 30% de su cuerpo.

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“Recibí una llamada desde Villa Garzón donde me informaron que mi hijo había sido quemado. Yo me desesperé, llamé a mi esposo y le dije lo que estaba pasando, pero él solo me calmó y me pidió que no me preocupara, que Sebastián tenía quemaduras de tercer grado”, indicó.

Yolanda envió un contundente mensaje a los agresores de su hijo, asegurando que los perdona de corazón; sin embargo, la justicia divina se encargará de hacerlos pagar por lo que hicieron a los tres soldados.

“A esas personas yo las perdoné de corazón. Solo la justicia divina será quien se encargará de lo que hicieron. Ellos no tienen corazón, son gente inhumana, porque no sienten el dolor por lo que hicieron, porque ellos también tienen hermanos, hijos, tíos y demás”, agregó.

La mamá de Sebastián reveló que nunca quiso que su único hijo se incorporara al Ejército Nacional; sin embargo, este era su deseo desde muy pequeño, incluso dejando sus estudios de lado para ir desde muy joven a servir al país.

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“Desde muy pequeño me dijo que le gustaba mucho el Ejército y que se iba a ir para allá. Él no terminó de estudiar porque se quiso ir desde antes de cumplir los 18 años. Cuando tuvo la mayoría de edad, me dijo: ‘Mami, me voy a pagar servicio’. Aunque yo no quería que se me fuera, le insistí que se quedara; le supliqué. Él solo me dijo: ‘Mami, yo quiero irme’”, relató.

Finalmente, Yolanda señaló que actualmente no conoce el futuro de su hijo y si continuará siendo parte del Ejército Nacional después de lo ocurrido. Además, envió un mensaje a las madres de soldados profesionales: “Tenemos que apoyarnos entre nosotras, apoyar a nuestros hijos y sacarlos adelante para que no pasemos por esta situación que vivimos. Hay gente inhumana que nos hace estas cosas y lastima a nuestros hijos que luchan por una paz, una alegría, por Colombia”, concluyó.

Sebastián Díaz Amaya permanece hospitalizado en el hospital Militar Central de Bogotá, donde se recupera de las quemaduras que sufrió y su evolución es satisfactoria, aunque requiere supervisión de manera permanente.