La baja órbita de la Tierra se está llenando de satélites y naves espaciales. La Oficina de Responsabilidad del Gobierno de Estados Unidos, GAO por sus siglas del inglés, advirtió que para 2030 podrían existir más de 58.000 objetos rondando el planeta.
Lo anterior implica que, indica esta entidad norteamericana, que los científicos tengan problemas para realizar sus investigaciones, y que las futuras misiones espaciales puedan tener un reto nuevo: evitar choques en el espacio próximo. La GAO hizo un llamado a las organizaciones para que busquen alternativas de cara a la sobrepoblación de estos objetos que no presentan, en el futuro corto, algo positivo.
Y tuvieron razón. Recientemente, un cohete Kinetica 1, de China, estuvo cerca de colisionar con un satélite de Starlink. Los hechos ocurrieron el 9 de diciembre de 2025, cuando; luego del lanzamiento de satélites Jinquan en el desierto de Gobi (el cohete transportaba nueve satélites nuevos) uno de los aparatos estuvo muy cerca de chocar con un objeto interestelar de Starlink a 560 kilómetros sobre la Tierra, según reveló Michael Nicolls, vicepresidente de Starlink.

Una advertencia que se pudo evitar
De acuerdo con las palabras del directivo de Starlink vía X, "Cuando los operadores de satélites no comunican las efemérides de sus satélites, pueden darse acercamientos peligrosos en el espacio". También indicó que, por lo que se conoce, el operador del lanzamiento chino no tomó las precauciones necesarias para prevenir choques con satélites que están en órbita. Como consecuencia de esta omisión, según Nicolls, el nuevo aparato tuvo una distancia de 200 metros con respecto a su par en el espacio próximo.
"La mayor parte del riesgo de operar en el espacio es porque falta coordinación entre los operadores de satélites, y eso tiene que cambiar", continuó el directivo en su cuenta de X.
Más allá de esta publicación, no se conoce mucha más información. La respuesta de CAS Space (operador del Kinetica 1), fue "todos los lanzamientos de CAS Space seleccionan sus ventanas de lanzamiento utilizando el sistema terrestre de posicionamientos para evitar colisiones con satélites/basura espacial que se conozcan". Asimismo aseguró, en un comunicado posterior que, de confirmarse este suceso, habría ocurrido "casi 48 horas después de la separación de la carga, momento para el cual ya había concluido hacía mucho la misión de lanzamiento. Cas Space coordinará con los operadores de satélites las acciones a seguir".
También publicó que se debe reestablecer colaboración entre los dos ecosistemas de New Space.

Riesgo del síndrome de Kessler
De acuerdo con Space.com, durante 2024, los satélites de Starlink tuvieron que realizar maniobras para evitar colisiones hasta en 300 ocasiones por día. Lo que equivale al doble de maniobras diarias durante 2023.
Lo cierto es que Space X no planea reducir su envío de satélites a la órbita y otros operadores espaciales tampoco. Por lo que la advertencia de la GAO podría cumplirse. El síndrome de Kessler hace referencia a una bola de nieve de choques de satélites en efecto dominó. Para muchos expertos, la humanidad está ad portas de iniciar este proceso.
La única opción que de momento tienen las operadoras espaciales es mejorar la comunicación entre sí, con el fin de evitar en el futuro próximo la pérdida de dos o más satélites humanos.