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¿Qué hacer con el ELN?

Samuel Hoyos, representante del Centro Democrático, debatió con Víctor De CurreaLugo, columnista.

Actualizado:
Jueves, Enero 11, 2018 - 04:08
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Víctor De CurreaLugo y Samuel Hoyos / Foto de LA FM

Vea aquí el debate entre Samuel Hoyos y Víctor De CurreaLugo

Los diálogos de paz entre el Gobierno y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) quedaron en suspenso a raíz de los atentados perpetrados por ese grupo, que llevaron al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, a ordenar el regreso para consultas de sus negociadores en Quito.

El Gobierno y el ELN tenían previsto instalar en la capital ecuatoriana la quinta ronda de diálogos de paz, un día después de concluido el alto el fuego bilateral que estuvo en vigor desde el primero de octubre del año pasado. Sin embargo, cuatro atentados de esa guerrilla contra la infraestructura petrolera en el centro y este del país horas después de que culminara el cese el fuego obligaron al mandatario colombiano a llamar a su equipo negociador, liderado por el exvicepresidente Gustavo Bell.

"Ante esta situación he conversado con el jefe de delegación del Gobierno en Quito, doctor Gustavo Bell, para que se regrese de inmediato para evaluar el futuro del proceso", aseguró Santos en una declaración en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo.

Tanto el Gobierno como la guerrilla habían manifestado en los últimos días sus intenciones de prorrogar el acuerdo de cese el fuego, medida que se esperaba fuera anunciada hoy en la quinta ronda de negociaciones. "El Gobierno nacional estuvo siempre dispuesto a prorrogar el cese al fuego con esa organización y a negociar uno nuevo. Así se lo hicimos saber desde hace varias semanas y lo reiteramos en los últimos días", añadió el presidente.

Tres de los atentados fueron contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas, el más importante del país, en los departamentos de Boyacá y Arauca. El primero sucedió en la aldea La Cañaguata, de Boyacá y "produjo caída de crudo en un caño seco en una extensión de 300 metros lineales aproximadamente, también afectó el suelo y la capa vegetal", detalló la petrolera estatal Ecopetrol en un comunicado.

Los otros dos ataques contra el oleoducto fueron perpetrados en las aldeas La Granada y Miramar, del municipio de Saravena, en Arauca, y el crudo quedó contenido en el cráter que dejó la explosión. También hubo un cuarto atentado en un pozo en el caserío de Volcán Blanco, del municipio de Aguazul, en el departamento de Casanare (este), que obligó a suspender el bombeo de crudo.

Asimismo, dos miembros de la Armada Nacional fueron atacados con una granada de fragmentación por el ELN, confirmó a periodistas el gobernador de Arauca, Ricardo Alvarado. En un intento de minimizar el impacto político de sus ataques, el ELN aseguró que "no debe alterarse el curso de las conversaciones" de paz por los atentados.

"Los incidentes sucedidos en el oriente colombiano ocurren en medio de la compleja situación de conflicto que sufre el país. Pero pese a ellos, no debe alterarse el curso de las conversaciones para lograr una salida política del conflicto", manifestó esa guerrilla en un comunicado.

Es por ello que el ELN considera que en el quinto ciclo de conversaciones se debe evaluar con el Gobierno la prolongación del recién terminado cese el fuego para "mantener sus logros y resolver los problemas que enfrentó".

"La mesa (de diálogos) dio un salto cualitativo al desarrollar las conversaciones en medio de un cese, por lo que nos mantenemos en la decisión expresada de darle continuidad a este logro pactando un nuevo cese bilateral, que supere las dificultades del anterior", añadió el grupo insurgente.

Por su parte, el jefe del equipo negociador del ELN, Israel Ramírez Pineda, alias "Pablo Beltrán", formuló un llamamiento al Gobierno para que reconsidere el "retiro de la mesa" de diálogo. "Lamentamos que ellos (delegación del Gobierno de Colombia) hayan hecho este gesto de no acudir a esta cita del quinto ciclo", dijo en una rueda de prensa en Quito.

El vicepresidente colombiano, Óscar Naranjo, que está en Nueva York, afirmó que el Gobierno mantiene su voluntad de lograr la paz con el ELN a pesar de los atentados. "Esperamos que ELN escuche el llamado de la sociedad civil y de los colombianos y cese los actos violentos contra nuestra infraestructura y nuestra nación y así podamos avanzar en un diálogo que nos permita llegar a un acuerdo definitivo que ponga fin a este conflicto", dijo Naranjo en el Consejo de Seguridad de la ONU.

Por su parte, la Defensoría del Pueblo aseguró en un mensaje difundido en su cuenta de Twitter que "es mejor un mal cese del fuego que una buena guerra". También, el procurador colombiano, Fernando Carrillo, manifestó que "la paz no se construye con actos terroristas sino con demostraciones contundentes de voluntad política".

"La Procuraduría rechaza ataques del ELN contra fuerza pública e infraestructura que debilitan aún más la confianza ciudadana en ese proceso", detalló el funcionario en un mensaje difundido en sus redes sociales. Después de rechazar los ataques del ELN, el presidente Santos se reunió hoy con su ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas; el alto comisionado para la Paz, Rodrigo Rivera, y con la cúpula militar para analizar la situación.