Un juez penal de conocimiento condenó a Marco Antonio Parra Rodríguez a 43 años y 9 meses de prisión por el feminicidio agravado de una adolescente de 15 años de edad. Los hechos ocurrieron el pasado 12 de marzo en zona rural del municipio de Chocontá (Cundinamarca).
La sentencia fue proferida luego de que la Fiscalía General de la Nación, a través de la Unidad Especial de Investigación de Delitos contra Niños, Niñas y Adolescentes (UENNA), de Cundinamarca presentara toda una serie de pruebas que demostraron la responsabilidad del procesado en el crimen.
Durante la investigación, los fiscales del caso recopilaron videos de cámaras de seguridad y otras evidencias que permitieron reconstruir los hechos.
Según los registros, Parra Rodríguez abordó a la menor en la vereda Pueblo Viejo Alto y la llevó hasta una zona boscosa, donde posteriormente fue hallado el cuerpo sin vida de la víctima.
En el lugar, los investigadores hallaron una prenda de vestir, un bolso y un teléfono celular que pertenecían al hoy condenado.
Además, los resultados de la prueba de ADN confirmaron que el material genético encontrado en el cuerpo de la joven correspondía a Parra Rodríguez, lo que reforzó la hipótesis de que fue la última persona en tener contacto con la adolescente.
Con base en estas pruebas científicas y testimoniales, el juez declaró al acusado culpable del delito de feminicidio agravado, imponiéndole una pena superior a cuatro décadas de prisión, que deberá cumplir en un establecimiento carcelario.
“La prueba pericial de ADN acreditó que el material genético hallado en el cuerpo de la joven correspondía a Parra Rodríguez. Estos elementos reafirmaron la teoría de que el hombre fue la última persona que tuvo contacto con la menor de edad”, puntualizó.