La diligencia judicial se realiza en el marco de la investigación abierta por los homicidios, torturas y descuartizamientos que, según lo confesado por varios exparamilitares en versiones libres, habrían ocurrido en este penal entre 1998 y 2003.
Según las autoridades, el objetivo es recopilar y cotejar información relacionada con el listado de internos para la época, visitantes y denuncias por personas desaparecidas que habrían sido asesinadas en este centro de reclusión.
La inspección se extendería a otras cárceles del territorio nacional, conforme avance la investigación penal.