Paciente clama auxilio por asfixia mientras enfermeras ríen y le ignoran

Los familiares de James Dempsey, veterano de la Segunda Guerra Mundial de 89 años, denunciaron que el hombre sufrió terribles experiencias a causa de la negligencia médica de los empleados de un centro de mayores en Atlanta, Georgia donde falleció, informó 'elpais.com'

Según la publicación del portal español, el abogado de los familiares de Dempsey presentó evidencia ante el Tribunal Supremo de Georgia, con apoyo del hijo de la víctima, quien muestra los malos cuidados que tuvo el hombre mientras estuvo internado en dicho centro.

En una grabación, que fue publicada bajo autorización del hijo de  James Dempsey, se muestra   cómo las enfermeras encargadas de cuidarlo respondieron a sus peticiones de auxilio con carcajadas.

El material, que es clave para el juicio en contra del centro para adultos, muestra  los momentos en que el señor Dempsey muestra síntomas de asfixia y ante la situación recurre a apretar con insistencia el botón de emergencia que alerta a las enfermeras.

En ese mismo instante James Dempsey comienza pedir asistencia médica, indicando que tiene dificultades para respirar, varios minutos después se presenta una enfermera en la habitación mientras Dempsey continuaba manifestando que no puede respirar bien.

Ante la situación la enfermera solo ajusta sus sábanas, eleva un poco su cama,  apagando el indicador de auxilio y se marcha del cuarto, dejando a James Dempsey en un estado crítico.

Casi una hora después las unas enfermeras volvieron a la habitación de Dempsey, donde él ya había perdido la conciencia y a pesar de ello las mujeres no realizaron acción alguna para verificar el estado de salud del hombre

Tiempo después la supervisora del turno, atendió al señor Dempsey al ejecutar una serie de maniobras de reanimación, mientras otras compañeras se reían del caso. Cuando el hombre falleció, todas las enfermeras indicaron que acudieron rápidamente a las llamadas del paciente, pero que a pesar de sus acciones para salvarlo ellas no tuvieron éxito.

Según la prensa norteamericana, a las enfermeras involucradas en el caso se les retiró su licencia y al centro de adultos se le impuso una cuantiosa multa económica como indemnización al familiares de  James Dempsey.