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Cómo se produce el humo del cónclave en el Vaticano

El humo blanco o negro que sale del Vaticano simboliza el resultado del cónclave, un ritual cargado de historia, simbolismo y precisión técnica.

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Actualizado:
Jueves, Mayo 8, 2025 - 11:01
Chimenea Capilla Sixtina
Del techo de la Capilla Sixtina sale la fumata, cuyo color anuncia la elección de un nuevo pontífice, o la continuación del cónclave.
AFP

Los ojos del mundo occidental están puestos en El Vaticano, donde 133 cardenales permanecen encerrados en la Capilla Sixtina para elegir al sucesor de Francisco I como nuevo Papa.

Una vez se haya tomado la decisión, de una pequeña chimenea en lo alto de la Capilla saldrá una señal de humo blanco. Mientras no haya elección, el humo será negro.

Esta chimenea ha sido cuidadosamente diseñada, y detrás del color del humo hay una fórmula química que garantiza que la señal sea completamente clara para los espectadores.

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La tradición de quemar las papeletas donde los cardenales depositan sus votos se remonta al siglo XVI, con el fin de asegurar la transparencia del proceso y evitar manipulaciones. Con el tiempo, el Vaticano adoptó el uso del humo como medio de comunicación simbólica, preservando esta costumbre centenaria a pesar de los avances tecnológicos.

Plaza de San Pedro
Miles de personas se reúnen en la Plaza de San Pedro esperando la elección de un nuevo papa.
AFP

“Desde la antigüedad, la gente ha visto el humo que sale —de los sacrificios de animales y granos en la Biblia, o de la quema de incienso en la tradición— como una forma de comunicación humana con lo divino”, explicó a la BBC Candida Moss, profesora de teología de la Universidad de Birmingham, Reino Unido.

Y añadió: “En la tradición católica, las oraciones ascienden hasta Dios. El uso del humo evoca estos rituales religiosos y la estética de asombro y misterio que los acompaña”.

El proceso para generar el humo

Según reporta la BBC, en el interior de la Capilla Sixtina se instalan dos estufas: una para quemar las papeletas y otra para producir el humo visible.

Ambas están conectadas a un tubo que conduce el humo al exterior a través del techo, de forma discreta y segura, sin afectar la estructura de la Capilla —de más de 500 años— ni los famosos frescos de Miguel Ángel.

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Por ello, los técnicos emplean una abertura existente o crean una trampilla provisional para insertar el conducto. Cada junta es sellada y el sistema se prueba rigurosamente para evitar fugas. Bomberos participan en el proceso ante cualquier eventualidad.

“Se trata de un proceso muy preciso. Si algo falla, no es sólo un problema técnico, sino un incidente internacional”, advirtió a la BBC Kevin Farlam, ingeniero de estructuras especializado en edificios patrimoniales.
“No es como poner una tubería en un horno de pizza. Cada componente debe instalarse sin dañar nada”, puntualizó.

Los químicos detrás del color del humo

No es por ruedas de prensa ni mensajes en redes sociales como el Vaticano comunica la elección de un nuevo Papa. La señal oficial es el color del humo.

Instalación de la chimenea
La instalación de la chimenea debe ser muy cuidadosa.
@VaticanNews/X

Antes de 2005, el contraste entre los colores no era claro para los fieles reunidos en la Plaza de San Pedro. Por eso, se comenzaron a emplear compuestos químicos específicos.

Según explicó a la BBC Mark Lorch, jefe del departamento de química y bioquímica de la Universidad de Hull, en el Reino Unido:

“Para el humo negro, se quema una mezcla de perclorato potásico, antraceno y azufre, que produce un humo denso y oscuro”.

“Para el humo blanco, se utiliza una combinación de clorato potásico, lactosa y colofonia de pino, que genera una combustión limpia y pálida”, agregó.

Fuente:
Sistema Integrado Digital