China anuncia avances en úteros artificiales: ¿qué tan cerca está la ciencia?
Estos son los alcances científicos y éticos del primer robot gestante en China, según experta.

La noticia sobre la creación del primer robot gestante en China generó debate mundial. En entrevista con La FM, la doctora Ana Sofía Aguilar, directora del Centro de Fertilidad de la Fundación Santa Fe, explicó los alcances científicos y éticos de este tipo de desarrollos.
¿Existen realmente los úteros artificiales?
La doctora Aguilar aclaró que actualmente la investigación validada por la ciencia no habla de un útero artificial, sino de una placenta artificial. Según señaló, “estos prototipos están diseñados en varias partes del mundo, pero no para tener la gestación completa, sino para prolongar la vida de bebés muy prematuros en condiciones similares a la vida intrauterina”.
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En este sentido, indicó que los estudios existentes se han realizado en modelos animales y no en humanos. “Todavía no hay experiencia en humanos”, precisó. Además, subrayó que los avances se enfocan en mejorar la sobrevida de recién nacidos prematuros, no en reemplazar la totalidad del proceso de gestación.
Sobre el anuncio proveniente de China, Aguilar comentó: “Revisé exhaustivamente la literatura médica y realmente estamos lejos de llegar a eso”. Aunque reconoció que existen avances en ciertos materiales y procesos, consideró que la ciencia aún no cuenta con la tecnología para sostener un embarazo completo en un dispositivo artificial.
¿Cuáles son los dilemas éticos de la ectogénesis?
Durante la entrevista, la especialista introdujo el concepto de ectogénesis, definido como la formación de un ser fuera de su ambiente natural. Explicó que, aunque científicamente podría llegar a ser viable en el futuro, los cuestionamientos éticos son significativos. “Más allá de que científicamente se logre, el debate es qué tan pertinente es”, afirmó.
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Aguilar señaló que la iniciativa surge como respuesta a la infertilidad de origen uterino. Casos como mujeres que nacen sin útero, que lo pierden por una enfermedad o parejas de hombres podrían ser los beneficiarios. Sin embargo, advirtió que “llegamos a dilemas éticos mucho mayores, porque no sabemos a qué nos enfrentamos en gestaciones donde no hay vínculo directo con la madre”.
En cuanto a los avances en fertilización in vitro, explicó que los embriones sobreviven un máximo de siete días en condiciones de laboratorio. “Pensar que ya hay tecnología disponible para lograr la supervivencia de nueve meses es lo que veo difícil por ahora”, puntualizó.
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Otro punto abordado fue el uso de óvulos fecundados en investigaciones. La especialista manifestó dudas sobre pruebas con células humanas y estimó que los estudios actuales se realizan con animales, como ovejas, bovinos y ratones. “Si establecemos que la vida empieza en la fecundación, seguramente serían vidas que se perderían en este proceso”, señaló.
Finalmente, la doctora Aguilar concluyó que la discusión sobre los úteros artificiales no se limita a la viabilidad científica, sino también a los principios bioéticos que rigen a la medicina. “Estamos todavía lejos de poder lograrlo”, resumió.