A pocos días de Halloween, una empresa del sector de confitería en Estados Unidos presentó una solicitud de bancarrota bajo el Capítulo 11, una figura legal que permite a las compañías reorganizar sus deudas sin detener completamente sus operaciones. La medida llega tras varios meses de descenso en los ingresos y mayores costos operativos dentro del mercado minorista.
Con esta decisión, la empresa busca proteger sus activos mientras desarrolla un plan de reorganización financiera que le permita continuar en funcionamiento y cumplir con sus obligaciones ante los acreedores. El proceso se encuentra bajo supervisión judicial en un tribunal federal de Texas.
Los documentos del caso indican que la compañía reportó activos entre 100,000 y 1 millón de dólares y pasivos de entre 1 millón y 10 millones de dólares, reflejando el impacto financiero que ha enfrentado a lo largo del año.
Se trata de Candy Warehouse, una distribuidora nacional de dulces con sede en Sugar Land, Texas, que presentó su petición el 24 de octubre ante el Tribunal de Quiebras del Distrito Norte de Texas, según informó el portal Bankruptcy Observer.

Qué significa acogerse al Capítulo 11
El Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos permite que una empresa con deudas significativas mantenga sus operaciones mientras desarrolla un plan para reorganizar sus finanzas. Durante el proceso, el deudor continúa administrando su negocio como “deudor en posesión”, bajo la supervisión del tribunal y los acreedores.
El plan puede incluir medidas como renegociar préstamos, vender activos no esenciales, cerrar líneas de negocio poco rentables o buscar nuevas fuentes de financiamiento. Una vez aprobado, la empresa puede continuar operando mientras cumple los pagos acordados.
Caída de ingresos en los últimos meses de Candy Warehouse
Datos de la firma Grips Intelligence muestran que Candy Warehouse registró ventas anuales de 4,5 millones de dólares en 2024, lo que representa una disminución del 10 % al 20 % en comparación con 2023. Entre mayo y julio de 2025, la compañía experimentó una reducción del 20 % en sus ingresos, frente al trimestre anterior.
En agosto de 2025, la tienda en línea obtuvo 203.555 dólares en ingresos a partir de 2.030 transacciones y 216.677 sesiones, con un valor promedio de pedido entre 100 y 125 dólares. Aunque esta cifra mostró cierta recuperación, las proyecciones apuntan a que los ingresos anuales podrían caer entre un 20 % y un 50 % para finales de año.

Un contexto desafiante para el sector minorista
El sector minorista estadounidense enfrenta un entorno económico complejo. El aumento de los costos de mano de obra, la inflación, las altas tasas de interés y los cambios en las preferencias de consumo han reducido los márgenes de ganancia y afectado la estabilidad de varias compañías.
Ante ese panorama, Candy Warehouse buscará mediante el Capítulo 11 una reestructuración financiera que le permita mantener su operación y adaptarse a los desafíos del mercado en una de las temporadas más importantes del año para la industria de los dulces.