Condenan a piloto y copiloto que lanzaron bomba en Santo Domingo, Arauca
Se trata de César Romero Padilla (piloto) y Johan Jimenez Valencia (copiloto) quienes manejaban el helicóptero que lanzó una bomba a la población en medio de bombardeos a las Farc.
La sala penal de la Corte Suprema de Justicia ratificó la condena de 30 años de prisión, que impuso el Tribunal Superior de Bogotá a dos pilotos de la Fuerza Aérea Colombiana por la masacre de Santo Domingo en Arauca ocurrida en diciembre de 1998.
El piloto César Romero Padilla y el copiloto Johan Jiménez Valencia participaron en la operación aérea efectuada el 13 de diciembre 1998 sobre la población. En el hecho murieron 17 personas, entre ellas seis niños, y 27 más resultaron heridas.
La Corte Suprema llegó a la conclusión que hay material probatorio que permite confluir que los uniformados que comandaban el helicóptero de la Fuerza Aérea, arrojaron una bomba tipo clúster o racimo sobre el caserío de Santo Domingo.
La Fuerza Aérea, en el proceso, argumentó que la muerte de estos civiles se dio por acción del grupo guerrillero de las Farc.
En el sitio, el grupo armado, había dejado un vehículo cargado con explosivos, por lo que hay dos versiones de los hechos: una apunta a la responsabilidad de las Farc y otra que señala a la Fuerza Aérea.
Cabe recordar que el Gobierno Nacional, a través de Enrique Gil Botero, en su momento ministro de Justicia, ofreció disculpas en nombre del Gobierno por la masacre de 17 campesinos ocurrida en 1998 durante un bombardeo de la Fuerza Aérea en la localidad de Santo Domingo, en el departamento de Arauca, fronterizo con Venezuela.
"En nombre del Estado manifiesto a las víctimas y a sus familiares mi solidaridad y la reiteración del compromiso ineludible de seguir trabajando por una Colombia en paz y garante de los Derechos Humanos", dijo Gil.
Con ese acto, el Gobierno dio cumplimiento a una sentencia del 30 de noviembre de 2012 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) que condenó al Estado en el caso "Masacre de Santo Domingo vs. Colombia".
Enrique Gil Botero agregó que "la exaltación de la memoria de las víctimas de esta comunidad y de su legado nos recuerda que todos como colombianos debemos seguir trabajando y construyendo el camino de paz y defensa de los Derechos Humanos".
El evento en Santo Domingo, al que asistieron más de 700 personas, fue coordinado por el Ministerio de Relaciones Exteriores en conjunto con otras entidades, las víctimas y sus familiares, y se realizó en la vía principal de la localidad, en donde ocurrieron los hechos.
Con información de Con información de EFE