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Un grupo de más de 80 organizaciones sociales, empresariales, académicas y comunitarias del país firmaron una carta pública dirigida a los colombianos, en la que expresan su preocupación por el actual contexto político y social del país, y hacen un llamado a la unidad nacional, a la defensa de las instituciones y al respeto por las reglas de la democracia.
El documento, titulado 'Una carta a los colombianos. Unidos por el cuidado de la democracia y contra la violencia', advierte que la democracia está en riesgo, especialmente ante hechos recientes como el atentado contra un precandidato presidencial, el incremento de la violencia en distintas regiones del país y las propuestas de reformas por fuera del marco constitucional.
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“La democracia está en riesgo. Lo está cuando no es seguro participar, cuando ser candidato o candidata es sinónimo de peligro de muerte. Lo está cuando las leyes y la constitución dejan de respetar, cuando se afecta el equilibrio y se vulneran los roles de las ramas del poder público”, señalaron los firmantes.
El texto plantea que, a pesar de la incertidumbre y el miedo, “en el corazón de 50 millones de colombianos también anida la esperanza”, y propone contrarrestar el ambiente de desconfianza con acciones que refuercen el Estado de derecho y el funcionamiento de las instituciones democráticas.
Entre los mensajes clave de la carta se destaca la necesidad de proteger el proceso electoral del año 2026: “Necesitamos elecciones seguras y libres en 2026. Los líderes políticos deben dar ejemplo y cumplir la ley. El Estado debe brindar garantías para una participación democrática. Proteger la vida y la seguridad de todos los colombianos es un deber ineludible. La seguridad no tiene ideología”.
Asimismo, las organizaciones firmantes expresaron su respaldo a las instituciones del Estado en su labor constitucional: “Rodeamos y apoyamos al Consejo de Estado y la Corte Constitucional para que nos sirvan como faro ético al proteger la Constitución y la ley; al Congreso para que, en la diferencia, busque acuerdos mínimos, con responsabilidad y sin populismo; a la fuerza pública a cuidar de candidatos y electores en todas las regiones; y a la Registraduría para que actúe y garantice la transparencia y eficiencia del proceso electoral”.
La carta concluye con una invitación a todos los colombianos a unirse en el cuidado de la democracia, reconociendo que “el cambio social debe surgir desde las instituciones, nunca contra ellas” y afirmando que “los sueños compartidos de un país se sustentan en el cultivo de una democracia sana y vibrante, de reglas tejidas con la paciencia de las décadas”.
Entre los firmantes se encuentran gremios y centros de pensamiento como la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), la Asociación Colombiana de Minería (ACM), AsoBancaria, Acopi, Andesco, Anif, Ascun, Camacol, la Cámara Colombiana de Infraestructura y el Centro de Estudios en Democracia y Asuntos Electorales (Cedae), entre muchos otros.
