Breadcrumb node

Sigue la guerra en Palacio, pero cambian los protagonistas

Cambian los protagonistas: ya no son Laura Sarabia y Benedetti.

Publicado:
Actualizado:
Jueves, Julio 24, 2025 - 09:22
Consejo de ministros
La decisión se produjo tras resolver una nulidad del trámite de tutela que originó esta prohibición.
Colprensa

Los Secretos de Darcy Quinn anunció que la pregunta que hoy circula en los corrillos políticos es: ¿Por qué Saade tiene tanto poder? ¿Por qué el presidente no le dice nada?

La guerra en Palacio no termina. Cambian los protagonistas: ya no son Laura Sarabia y Benedetti. Ahora hay varias disputas: Saade contra Benedetti, Saade contra Juliana, Juliana contra Angie y Angie contra Juliana.

No se me pierdan: Angie Rodríguez, directora del DAPRE, era muy amiga de Juliana Guerrero, exjefa de gabinete de Armando Benedetti y quien estuvo involucrada en un escándalo por el uso de aeronaves para asuntos personales. En medio de esta guerra de poder, Angie y Juliana ya no son aliadas, y a esa disputa se ha sumado el pastor Saade, quien hace unos días le prohibió el ingreso a Palacio a Juliana. Sin embargo, Juliana tiene línea directa con el presidente, quien ordenó que podía entrar cuando quisiera. Al parecer, no hubo consecuencias para Saade.

Lea además: Sicario que atentó contra Miguel Uribe tendrá pena de 2 a 8 años sin rebaja y el juicio no será público

Otra pelea silenciosa y más solapada es la de Saade y Benedetti, quienes posan de aliados, pero tras bambalinas Saade ha hecho varias jugadas, como sacarlo de la oficina presidencial y reclamarle porque Benedetti no golpea ni pide permiso para entrar al despacho del jefe de Estado. Se dice que Saade estaría intentando influir en los cambios ministeriales, enviando a Benedetti más lejos del círculo cercano del mandatario.

Sí, se habla de cambios en el primer círculo presidencial. ¿Qué hay de fondo?

Se rumora que Benedetti podría ir a Cancillería, que Guillermo Alfonso Jaramillo, actual ministro de Salud, pasaría al Ministerio del Interior, e incluso que Saade podría ser nombrado ministro de Defensa. Todo parecería absurdo en una situación normal, pero no estamos en una. ¿Benedetti manejando nuestras relaciones internacionales? ¿Jaramillo el Congreso? ¿Saade las fuerzas militares?

Me dicen que esos cambios no se darían, porque tampoco están tan locos. El poder de Saade radica en que es disruptivo: dice lo que otros no se atreven, como hablar de reelección, cerrar medios o cerrar el Congreso. Y el presidente mantiene la misma estrategia de siempre: dejar que se enfrenten entre ellos, como lo hizo con Laura Sarabia y Benedetti en su momento.

Ahora bien, ¿a los mencionados les encantarían esos cargos? Por supuesto que sí.

Más noticias: Crece el poder burocrático de Daniel Quintero en el gobierno

Otro cuestionamiento es el poder de Juliana Guerrero, que tampoco se entiende del todo.

Es un misterio. Para empezar, le dice al presidente “Gustavo” y no “presidente”. Una fuente alta del Gobierno me confirmó que la lista de recomendados de Juliana Guerrero en altos cargos del Estado es extensa. Tiene nombradas a tres secretarias generales en tres ministerios —funcionarias que manejan recursos y contratación—, además del jefe administrativo y financiero del Ministerio de Medio Ambiente, quien, a propósito, es hijo del director de la Oficina de Consulta Previa del Ministerio del Interior.

Nos confirman, además, que Juliana Guerrero estaría detrás del anunciado remezón ministerial y que habría pedido la salida de Lena Yanina Estrada Añokazi, ministra de Medio Ambiente; de Angie Rodríguez, directora del DAPRE; y de Carlos Rosero, actual ministro de Igualdad.

Hay un nuevo debate sobre las encuestas

Todo parte de la pregunta sobre a quién se debe medir y a quién no en las encuestas de intención de voto para las presidenciales.
Algunos ya cuestionan si se debe incluir al precandidato Miguel Uribe en esas mediciones, lo cual ha generado molestias dentro del Centro Democrático.

De interés: Nerviosismo en gabinete de Petro por cuenta de los anunciados cambios

Dicen que, por supuesto, debe estar incluido, porque es un precandidato presidencial y, además, Miguel Uribe está vivo. Ha pasado muy poco tiempo desde el atentado que lo mantiene en una clínica. Califican como infame la sola sugerencia de excluirlo.

El expresidente Álvaro Uribe ha pedido prudencia, tiempo y empatía ante la situación.

Fuente:
Sistema Integrado Digital