César Gaviria fue derrotado estruendosamente en la Cámara, pero por mandar el candidato de él, a Julián Peinado, a quien el resto de la bancada no conoce ni quiere.
Trataron de madurarlo unos meses antes atacando a Gustavo Petro, pero la queridura es importante para los liberales y Andrés Calle es querido.
Debía derrotársele con un Carlos Ardila o Álvaro Monedero, como sucedió en Senado con un querido como Iván Name. Es lo que dicen los parlamentarios. Además, los liberales no citaron a bancada de cara al 20 de julio, como sí lo hicieron los otros partidos.
Incluso uno de los gaviristas, Alejandro Carlos Chacón, puso un tuit que decía: "El partido #miGato cita bancada el 20 de julio, ¿y el @PartidoLiberal?"
Mucho descontento y sostenerlo va a ser muy difícil, y se habla de instalar una junta parlamentaria que dirija el partido, eso sí, sin dejar entrar a los liberales que están en el Gobierno. Claro que, la verdad, este escenario lo hemos visto en varias oportunidades y el expresidente Gaviria parece tener las vidas del gato.
Otro funcionario del Gobierno que deja plantados a los ciudadanos, esta vez en Agroexpo. Se trata de José Rafael Vecino, subgerente de Artesanías de Colombia, a quien el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, había comisionado para que visitara a un grupo de artesanas de Nariño que estaban en Agroexpo. Debía llegar ayer a las 10 de la mañana pero dijo que no encontraba dónde parquear y que no le era posible llegar. Muy mal: dejó a las artesanas plantadas. Es que el mal ejemplo se repite.