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Clara Rojas: Tras diez años de mi liberación me siento plenamente feliz

La congresista este miércoles cumple diez años de retornar a la libertad.

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Martes, Enero 9, 2018 - 14:37
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Clara Rojas - Colprensa

La actual representante a la Cámara, Clara Rojas, permaneció 6 años en poder de las Farc. El 23 de febrero de 2002, mientras adelantaba un recorrido de campaña política junto a la candidata a la Presidencia, Íngrid Betancourt, fue secuestrada por la guerrilla. (Lea: Clara Rojas, 10 años de su regreso a la libertad)

Fue sólo hasta el 10 de enero de 2008 que se cumplió la esperada liberación gracias a la mediación del fallecido presidente de Venezuela, Hugo Rafael Chávez, y la exsenadora Piedad Córdoba. Se acababa el suplicio y se conocía también que su hijo Emmanuel se encontraba en manos del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar tras un intento de engaño de uno de sus secuestradores.

En diálogo con LA FM, Clara Rojas recordó el proceso que ha adelantado para retomar su vida luego de este lamentable episodio de cautiverio.

Diez años después me cuesta volver atrás pero igual quiero recordar que esos momentos previos a la entrega fueron de gran expectativa y esperanza por poder recobrar la libertad”, sostuvo.
Insistió que se siente “plenamente feliz, y agradecida con la vida y con el ser superior” porque ha podido sobrevivir y rehacer su vida para volver a estar como un ciudadano más.
Me siento muy agradecida y sólo espero que los horrores de la guerra nunca se repitan. Mi anhelo es que ningún colombiano más tenga que padecer las penurias del secuestro”, recalcó.
La legisladora dijo que apoya el Acuerdo de Paz porque a pesar de los matices y grises que pueda tener, éste representa un inmenso desafío para todos los colombianos.
Considero que estar hoy en esta situación con las Farc demuestra que Colombia sí puede estar en paz sin tener 3.000 muertos al año y 500 soldados en el Hospital Militar”, aseguró.
Vale la pena recordar que el secuestro, a la luz del Estatuto de Roma, se considera rotundamente prohibido por el DIH al margen de tratarse de un acto cometido por parte de un grupo que es parte de una confrontación armada.