Doris Adriana Niño, el crimen que involucró a Diomedes Díaz

Una fuerte polémica se ha suscitado en los últimos días en el país luego de que el senador Gustavo Bolívar reviviera el nombre de Doris Adriana Niño, señalando sin tapujos al fallecido Diomedes Díaz de ser su asesino; al tiempo que hizo algunas comparaciones entre este caso y el del senador Álvaro Uribe.

Las reacciones no se hicieron esperar luego de que se viralizaran las comparaciones de Bolívar frente al supuesto actuar de cada uno (Diomedes – Uribe) y las reacciones de los seguidores, tanto del ‘cacique’ como del expresidente frente a cada uno de los casos judiciales que los involucran.

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Más allá de la polémica que esto generó, el tema de Doris Adriana Niño volvió a retumbar en el país, especialmente en las generaciones que desconocen este capítulo en la vida del cantante vallenato Diomedes Díaz y por el cual pagó algunos años de cárcel.

Pues Doris Adriana Niño era una joven de 27 años, fan de Diomedes Díaz, quien el 15 de mayo de 1997 desapareció luego de asistir a una fiesta en el norte de Bogotá, en el apartamento donde se hospedaba el cantante. Semanas después se conoció que había sido encontrada sin vida y enterrada bajo otra identidad en Boyacá.

Apartes del expediente de este caso registran que la joven fue recogida por un escolta de Diomedes, identificado como Oswaldo Álvarez, en su casa en Soacha el 14 de mayo de ese año, hacia la medianoche. Posteriormente fue dejada en el apartamento donde se encontraba el cantante junto a varias personas más.

En esa reunión, en la que hubo alto consumo de drogas y licor, Doris Adriana habría sostenido relaciones sexuales con Diomedes, pues se dice que tenían una relación sentimental desde meses atrás. Posteriormente se habría presentado una fuerte pelea que involucró a Luz Consuelo Martínez, otra novia del artista y quien en ese momento le contó a la fan que estaba embarazada del ‘cacique’.

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Hacia las 5:00 de la mañana del 15 de mayo, Doris habría salido de la residencia, según el relato de Diomedes, pero horas más tarde fue encontrada sin vida y desnuda por unos trabajadores en la vereda de San Onofre, municipio de Combita (Boyacá). Los hombres que se percataron de la situación, aseguraron que un sujeto bajó el cuerpo sin vida de un carro y posteriormente lo arrojó junto a unas prendas de vestir y se marchó. La investigación determinó que quien abandonó sin vida a la joven era escolta del cantante.

Inicialmente se hizo un levantamiento como N.N. y Doris fue enterrada en una fosa común. Días después, unas trabajadoras sexuales del lugar reclamaron el cuerpo asegurando que se trataba de una de ellas, y que había sido asesinada por el dueño de un bar.

El cuerpo fue entregado a las prostitutas y enterrado por el párroco de allá, bajo el nombre de Sandra. El caso de la muerte de 'Sandra' se cerró en la Fiscalía, mientras familiares de Doris movían ‘cielo y tierra’ buscándola.

Fue hasta después de varios meses que familiares de la joven acudieron a un programa de televisión y al exponer la foto de Doris fue reconocida en Boyacá, desde donde llamaron para avisar que esa misma mujer estaba enterraba como prostituta y con otro nombre.

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Tras recuperar el cuerpo y continuar la investigación, ya no sobre desaparición, sino por la muerte, fueron varias las causas que se dieron en este proceso, una de ellas fue sobredosis de cocaína; sin embargo, luego se determinó que la droga encontrada en el cuerpo de la joven no era suficiente para causar una muerte. Se determinó entonces que fue asesinada por asfixia mecánica provocada. Explica el dictamen que la víctima recibió una fuerte presión sobre su boca y su nariz. Además, se reveló que presentaba señales de haber sido violada.

Los hechos llevaron a las autoridades a involucrar en esta muerte al cantante Diomedes Díaz, quien nunca aceptó haber atentado contra la vida de quien fue su amante. Su novia, Luz Consuelo Martínez también fue vinculada a la investigación.

En una de las declaraciones del artista, contó que Doris sí asistió a su apartamento y que allí tuvieron relaciones sexuales, que luego ella se enojó al saber que el cantante había embarazado a Consuelo y que por eso se marchó a la madrugada. Dijo que la furiosa fan tomó un taxi y que de allí no supo más de ella.

Estas declaraciones no convencieron del todo a los investigadores, razón por la que en 1997 fue dictada en su contra medida de aseguramiento mientras se esclarecían los hechos. La medida la cumplía en su casa debido a una enfermedad que padecía; pero posteriormente, en el año 2000, fue aprovechada la oportunidad por el ‘cacique’ para fugarse. Años más tarde se entregó a las autoridades junto a Luz Consuelo, quien también fue condenada.

En su ausencia, la investigación culminó determinando que Diomedes Díaz había sido responsable de la muerte de su fan, razón por la que en enero de 2001 fue condenado como reo ausente por la muerte de Doris Adriana Niño, bajo el delito de homicidio preterintencional. Según se estableció, Díaz no quería causarle la muerte a la joven, pero tampoco hizo nada para impedirla.

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La pena a pagar era de 12 años y 6 meses de cárcel, pero esta condena fue modificada varias veces, hasta que finalmente quedó establecida en 6 años y 6 meses.

Este ha sido uno de los más polémicos casos judiciales en Colombia luego de que involucrara a uno de los ídolos del género vallenato y del cual, hasta su muerte, sus fanáticos defendieron su inocencia.

Ahora se revive el caso en la memoria de los colombianos debido a las expresiones de Gustavo Bolívar. Una de ellas es en su reciente columna en la que habla de la muerte de Doris Adriana diciendo que a Diomedes y sus acompañantes "en medio del degenere se les fue la mano y no supieron cómo actuar”, al tiempo que asegura que “a Uribe uno le nota premeditación". Sin embargo, sobre esta comparación el senador ofreció disculpas.

Pero hubo otra comparación en su cuenta de Twitter en la que aseguró: "Las caravanas por la libertad de un criminal me recuerdan el recibimiento apoteósico que le hicieron en Valledupar a Diomedes Díaz después de matar a Doris Adriana Niño. Necesitamos 30 años con presupuestos portentosos para educar este país".