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Juez envió a la cárcel La Picota a James Francisco Arias, el 'Zar de la chatarra'

Ante un juez de control de garantías, Arias aceptó cargos por lavado de activos, concierto para delinquir, contrabando, falsedad en documento privado y enriquecimiento ilícito. 

Actualizado:
Lunes, Diciembre 28, 2015 - 10:55

En días pasados, por solicitud de la Fiscalía General de la Nación, un juzgado de garantías de Bogotá declaró en contumacia al denominado 'Zar de la chatarra', el hombre que fue capturado este domingo en momentos en que salía de misa.


 



La investigación se remonta al 2006 cuando a la Unidad de Extinción y Contra el Lavado de Activos, le fue allegada abundante información legalmente obtenida; elementos de prueba del registro ilícito de importaciones y exportaciones ficticias de chatarra a Estados Unidos, China y España.

 


La Fiscalía estableció que en el 2007 fueron creadas cerca de 26 empresas, las cuales por iniciativa de la firma R&B CONSULTORES Y ASESORES, de propiedad de la Blanca Jazmín Becerra, sentenciada por estos hechos, les asesoró sobre la manera de obtener la devolución del IVA por la exportación de la chatarra.


 



De la misma manera,  se registraron importaciones ficticias de material ferroso desde Venezuela que de forma camuflada era ingresado por las fronteras,  vía terrestre, por trochas, simulando traer Níquel o Plomo, pero que realmente era cobre. El metal era hecho pasar como de origen nacional, con el fin de evitar su origen nacional y evitar el pago de impuestos.


 


Se calcula, por ejemplo, que tan solo en una de las empresas identificada por las autoridades como C.I Mundo Metal, compró en el 2007 cerca de 60 mil millones de pesos en chatarra tan solo en Cúcuta, Norte de Santander, lo que equivale a 5 millones de kilos de material, lo que no concuerda con la cantidad de población y  número de industrias que no generan tantos desechos de acuerdo con los estudios adelantados por la entidad.


 


En otros balances reportan la compra de un millón 349 mil kilos de chatarra pero las empresas vendedoras no reportaron a la Dian, las facturas del ingreso del capital que corresponde a estas negociaciones.



 

Fuente:
Sistema Integrado Digital