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ONU en reclamo a Israel: Asesinato deliberado de palestinos es un crimen de guerra

El alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, dijo que debe ponerse fin a la ocupación de los territorios palestinos.

Actualizado:
Viernes, Mayo 18, 2018 - 04:13
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La ONU, donde hace setenta años se aprobó una resolución que hizo posible la creación del Estado de Israel, pidió al Gobierno de ese país que ponga fin a la ocupación de los territorios palestinos y que juzgue a quienes han disparado contra manifestantes desarmados durante las protestas en Gaza.

"La ocupación debe terminar, de modo que el pueblo de Palestina pueda ser liberado", declaró el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein.

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El máximo responsable de derechos humanos en la organización relató que los que han muerto en las manifestaciones pacíficas "y que estaban completamente desarmados" recibieron disparos "en la espalda, en el pecho, en la cabeza y en las extremidades".

El alto comisionado se dirigió de esa manera a las delegaciones que participan hoy en una sesión urgente convocada por el Consejo de Derechos Humanos (CDH) de Naciones Unida para debatir sobre la situación en Gaza y las posibles medidas a adoptar.

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En ese sentido, Zeid señaló que frente al hecho de que no hay rendición de cuentas por las ejecuciones extrajudiciales y otras violaciones denunciadas, apoya la iniciativa planteada en el CDH para que haya una investigación internacional sobre esos hechos.

Las cifras más confiables indican que los civiles palestinos muertos durante las protestas, particularmente el pasado lunes, se sitúan entre 87 y un centenar, mientras que los heridos suman 1.360, según las informaciones recolectadas por la oficina de Zeid.

Miles de palestinos han participado desde el 30 de marzo en manifestaciones para reclamar su derecho al retorno a las tierras ocupadas por Israel, pero el pasado día 14 se alcanzó un pico de violencia con cerca de medio centenar de palestinos muertos en un solo día.

Esa jornada coincidió a la vez con el traslado oficial de la embajada de Estados Unidos a Jerusalén -un acto ampliamente criticado a nivel internacional- y con el aniversario de la creación del Estado de Israel, que posteriormente forzó el éxodo palestino.

En su intervención ante el CDH, el relator especial de la ONU sobre los derechos humanos de los palestinos, Michael Lynk, sostuvo que el "asesinato deliberado" es un crimen de guerra de acuerdo al Estatuto de Roma, en referencia a los eventos en Gaza, un pequeño territorio donde se hacinan dos millones de palestinos.

Link argumentó que la responsabilidad por la violencia en Gaza recae sobre Israel, y su comando político y militar, responsable de once años de bloqueo económico, comercial y de viajes.

La embajadora de Israel ante la ONU en Ginebra, Aviva Raz Scechter, respondió a todas esas acusaciones negando cualquier responsabilidad de su Gobierno y comentando que su país "sólo se defiende a sí mismo, como lo haría cualquier otro Estado".

Sostuvo que el culpable de lo ocurrido es el movimiento islamista Hamás, "que dirigió a su población hacia una contienda violenta contra Israel, utilizándola como escudos humanos".

A su turno, Estados Unidos defendió con firmeza a Israel y también presentó a Hamás como el único responsable de la tragedia de la última semana.

"Rechazamos la afirmación de que se han cometido violaciones de los derechos humanos y recordamos que la escala de violencia (en Gaza) es bastante pequeña comparada con situaciones peores que se registran en todo el mundo", dijo el diplomático Theodore Allegra.

Por su parte, la Unión Europea urgió a Israel a respetar el derecho de los palestinos a manifestarse pacíficamente y a ejercer la fuerza únicamente como último recurso y de manera proporcional.

China solicitó a ambas partes que "abandonen la violencia" y abogó por reiniciar negociaciones de paz para el reconocimiento de Palestina como un Estado soberano y con Jerusalén Oriental como su capital.

Brasil y México, entre otros países de Latinoamérica, apoyaron esa idea por considerarla la única forma de solucionar el conflicto entre Israel y Palestina.

Con información de EFE – Ginebra