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Dieciocho personas resultaron heridas, una de gravedad, cuando un dron explosivo disparado desde el Líbano por el grupo extremista Hezbollah impactó contra un centro comunitario en la aldea fronteriza norte de Arab al-Aramshe, en Israel, informaron médicos y militares. El Centro Médico Galilee en Nahariya reportó que una víctima se encontraba en estado crítico y otras dos gravemente heridas, mientras que cuatro personas estaban en estado moderado y el resto sufrió heridas leves.
El grupo terrorista Hezbollah se atribuyó la responsabilidad del ataque, afirmando que su objetivo era un edificio utilizado por el ejército israelí con misiles guiados y drones cargados de explosivos. Este acto de agresión fue presentado como represalia por el asesinato de tres miembros de su organización, incluidos dos comandantes, en ataques israelíes en el sur del Líbano un día antes.
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Las Fuerzas de Defensa de Israel confirmaron que varios proyectiles impactaron en la comunidad fronteriza, sin proporcionar detalles inmediatos sobre las víctimas. Imágenes compartidas en redes sociales mostraron el momento en que el dron, cargado con explosivos, se estrellaba contra el centro comunitario. Sorprendentemente, las sirenas de alerta no sonaron antes del ataque, lo que llevó a las FDI a iniciar una investigación sobre el incidente.
Como respuesta al ataque, las FDI llevaron a cabo ataques aéreos contra los sitios de lanzamiento desde donde se dispararon los drones. Además, aviones de combate israelíes bombardearon un edificio en Ayta ash-Shab, al sur del Líbano, donde se reunían agentes de Hezbollah.
Este acto de violencia se suma a una serie de incidentes recientes en la región fronteriza entre Israel y el Líbano. Hezbollah ha intensificado sus ataques contra comunidades israelíes y puestos militares en respuesta al conflicto en Gaza. El intercambio de ataques siguió a un bombardeo previo de Hezbollah contra la base militar de Biranit en Israel, que no dejó heridos.
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El aumento de la escalada de violencia entre Israel y Hezbollah ha provocado preocupaciones sobre una posible escalada militar a gran escala en la región. Israel ha amenazado con una respuesta contundente si el grupo no cesa sus ataques y continúa amenazando a las comunidades del norte de Israel.
Hasta la fecha, las hostilidades en la frontera han cobrado la vida de ocho civiles israelíes y 10 soldados de las FDI, mientras que las bajas en el lado libanés incluyen miembros de Hezbollah y civiles.
