"No volar drones cerca de aves de presa: atacan al verlos como una amenaza o como una presa asequible. La gracia puede dañar potencialmente a las aves y, además, puede costar dinero", fue la conclusión a la que llegaron Adam Lancaster y su hermano, dueños del drone.
En las imágenes se puede apreciar como el águila derribó al drone, dado a que le habría parecido un 'peligroso' enemigo.
El curioso hecho ocurrió en Australia y el video se tomó las redes sociales.