Sismo en Paratebueno deja 85% de Santa Cecilia devastada: Gobernación de Cundinamarca
En los próximos días se hará una visita conjunta con la Unidad de Gestión del Riesgo.

La Gobernación de Cundinamarca entregó un nuevo balance sobre las consecuencias del fuerte sismo que sacudió los municipios de Paratebueno y Medina el fin de semana. Según informó el gobernador Jorge Emilio Rey, la emergencia en varias zonas rurales afectó a más de 1.400 personas que lo han perdido todo.
“Hay que decir que los centros poblados de Santa Cecilia, Nuevo Horizonte, Japón y Europa en Paratebueno, así como Santa Teresa en Medina, han sido totalmente devastados”, señaló Rey.
En Santa Cecilia, por ejemplo, de las 200 viviendas que conforman el caserío, ya se han inspeccionado 186, y el 85% deberán ser demolidas por los graves daños estructurales.
La situación educativa también es crítica. Más de 27 instituciones escolares en ambas poblaciones sufrieron afectaciones, y casi el 60% de ellas requerirá reconstrucción total.
Para enfrentar esta situación, la Gobernación adelantará las vacaciones escolares y pondrá en marcha un modelo flexible que garantice el derecho a la educación en espacios provisionales.
Lea también: Gobernadores denuncian más de 30 hechos violentos en 10 días y piden acción urgente del Gobierno
“Hemos desplegado toda nuestra capacidad operativa. Los organismos de respuesta todos están en el sitio garantizando también atención a los damnificados. Seguimos avanzando en esta caracterización e inventario de necesidades y prontamente debemos iniciar las acciones de reconstrucción”, señaló.
El gobernador explicó que ya se levanta un censo de damnificados, con el fin de entregar subsidios de arrendamiento a las familias que quedaron sin hogar. Además, en los próximos días, se realizará una visita conjunta con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) para coordinar esfuerzos entre el Gobierno nacional, el departamento y las administraciones locales.
La tragedia ha despertado una ola de solidaridad en el departamento, mientras las autoridades trabajan sin pausa para devolver la esperanza a las comunidades que, en cuestión de minutos, lo perdieron todo.