Proyecto de ley que busca prohibir uso de asbesto, aprobado en primer debate

La iniciativa de la senadora Nadia Blel pasa ahora a debate en la plenaria de Senado. De acuerdo con la congresista ponente “este proyecto es por las familias y por los niños que vienen; hoy es una victoria y agradezco al Gobierno que llegó a enriquecer esta ponencia”.

El proyecto contempla un periodo de transición de cinco años para que la industria pueda realizar los cambios que requerirá la ley. “Queremos que las empresas puedan adaptar sus procesos a tecnologías más limpias por eso el Ministerio de Trabajo creará un plan de adaptación laboral para todos los empleados” explicó la senadora.

El proyecto contempla además sanciones que van desde los 100 hasta los 5000 salarios mínimos por el uso de asbesto, así como sanciones penales y administrativas.

Por su parte, el viceministro del Interior, Luis Ernesto Gómez, quien apoyó la iniciativa, señaló que “los colombianos de están enfermando por el asbesto, está matando colombianos y debemos reconocer que esta sustancia ha sido prohibida en más de 55 países y está considerada por la Organización Mundial de la Salud como un agente cancerígeno”.

Daniel Pineda, vocero del movimiento Colombia Sin Asbesto. y esposo de Ana Cecilia Niño, dijo al finalizar este debate que le “hubiera gustado que mi esposa viera esto por todo el trabajo que se ha hecho desde que ella murió y lo que veníamos haciendo antes que ella falleciera. Estábamos orientados a que se aprobara el proyecto en primera instancia y estoy muy contento porque es un logro de todos los colombianos”.

Silvia Gómez, coordinadora de Greenpeace Colombia, señaló que "no es una victoria, pero es un primer paso porque en la primera instancia se habían caído siete proyectos y esto demuestra que la presión pública y la participación pública sí hacen la diferencia y esta vez se sintieron que estaban siendo escuchados por todo un país y le debían a los colombianos esta decisión”.

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, OMS,el asbesto cobra la vida de alrededor de 300 colombianos al año y más de 1300 personas en el mundo.