Delincuentes ingresaron a una vivienda a través de una rejilla de sistemas eléctricos, en donde la administración departamental almacenaba alimentos que iban a ser entregados a cerca de 500 niños indígenas de Lloró y Bagadó, en Chocó.
En varias bolsas y costales, los delincuentes se llevaron alimentos como arroz, papa, panela y enlatados, confirmó el secretario de Gobierno de Chocó, Bismarck Calimeño.
Según las primeras versiones recopiladas por las autoridades, el hurto habría sido cometido por delincuentes comunes que podrían ser habitantes aledaños a la vivienda en donde se almacenaban los alimentos.