El exalcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, se pronunció ante las manifestaciones que se registraron a las afueras de la Registraduría, durante el trámite de modificación de candidato para las elecciones atípicas del próximo 14 de diciembre, en las que se elegirá al nuevo alcalde la capital santandereana.
“Llamo al alcalde designado y al Gobernador para que se nos garantice la seguridad”, afirmó, solicitando protección para ejercer los derechos políticos.
A través de sus redes sociales, Beltrán aseguró que mientras permaneció al interior de la Registraduría, junto a integrantes de su proyecto político, personas en motocicletas se acercaron para intimidarlos.
“Hasta el último momento nos han perseguido para no dejarnos participar de las elecciones; de forma jurídica y física. Cualquier cosa que me pase a mí o a los integrantes de nuestro equipo es el resultado de la falta de garantías”, denunció.
El plazo límite para presentar los documentos de modificación de candidatos venció a la medianoche del jueves (06 de noviembre). La situación que desencadenó que la inscripción del nuevo candidato (Arturo Zambrano), no se pudiera efectuar, fue un desacuerdo entre los partidos que avalaron la candidatura del exasesor de despacho de Jaime Andrés Beltrán, Cristian Portilla.
Ante esa situación, Cambio Radical compartió un comunicado en el que aseguró que el acuerdo de coalición establece que, tras la renuncia del candidato inscrito, la postulación de un nuevo aspirante debía estar avalada por consenso de los partidos firmantes y, en caso tal de no estar de acuerdo, suscribir un acta.
El partido del exvicepresidente Germán Vargas Lleras, aclaró que no se firmó ningún acta, ni expresó su consentimiento para respaldar otra candidatura: “por lo que la inscripción de Arturo Zambrano no cuenta con el apoyo ni la validez jurídica y política de Cambio Radical, pues no cumplió con lo acordado en el marco de la coalición”, afirmó esa colectividad.
Ante la negativa de Cambio Radical por la postulación de Arturo Zambrano, Beltrán se jugó su última carta para mantenerse, de alguna manera, en la contienda electoral. Por ello, se decidió que Portilla retirara su renuncia y se consolidara como el octavo candidato en disputa por la Alcaldía de Bucaramanga.