Diez datos curiosos del embarazo
El embarazo trae consigo un sin fin de sorpresas.
Cuando una mujer está embarazada, desde el día uno hasta el momento del alumbramiento, pasa por una serie de experiencias que van desde lo físico hasta lo emocional.
Para la mayoría de las futuras madres resulta todo un desafío el desarrollo de su embarazo, pues deben lidiar con situaciones que pueden llegar a ser incomodas, sin embargo, el instinto maternal les permite disfrutar de cada semana y cada patadita de su bebé.
Durante este periodo, suceden cosas muy curiosas, y aquí le traemos algunas de ellas:
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El corazón del feto comienza a formarse en la quinta semana de embarazo, y desde ese momento comienza su función. Aproximadamente en la sexta semana ya se podrá escuchar con la ayuda de un aparato llamado doppler.
Antes del embarazo el útero tiene el tamaño de una naranja, y puede crecer tanto como una sandía para el momento del parto. La cavidad uterina aumentará su capacidad de 500 a 1.000 veces, y llegará a pesar 900 o 1.000 gramos al término del embarazo.
Además de llenarse de mucho amor por ese bebé que viene en camino, el corazón de una embarazada puede llegar a aumentar su trabajo en un 50% debido al incremento del volumen sanguíneo en su organismo. Estos cambios en la función cardiovascular de la madre son necesarios para la buena evolución de la gestación.
El sexo del bebé se define desde el momento de la fecundación, pero el papá es el responsable de determinar si será niño o niña. Esto se debe a que el espermatozoide es quien transporta el cromosoma que define el género.
El incremento en la producción de estrógeno durante el embarazo puede llegar a producir cambios en el sentido del olfato. A esto se le llama ‘Hiperosmia’, y las mujeres son capaces de percibir con más facilidad los olores agradables o desagradables. Esta sería una de las principales causas de las náuseas y vómitos.
A medida que su hijo va creciendo, dentro de su veinte pueden pasar muchas cosas. Se mueve y se gira sobre sí mismo, le puede dar hipo, aprende a chuparse el dedo, saca la lengua, se ríe, bosteza, orina y hasta puede abrir sus ojitos y escuchar.
Aunque se trata de un proceso poco conocido y que suele darse en animales como ovejas, caballos o roedores, también ha pasado en humanos. Se trata de la concepción de un segundo feto cuando ya está en marcha una primera gestación. Es decir, dos bebés se conciben en distintas fechas.
Según varias investigaciones científicas, los bebés sí lloran dentro del vientre materno. Algunos expertos aseguran los niños practican el llanto y también expresiones faciales de dolor antes de nacer.
Normalmente en todas las embarazadas se les marca una línea negra en sus pancitas. Dicha línea vertical va desde el ombligo hasta el pubis y en ocasiones, se puede prolongar hasta el diafragma. Esta raya es conocida como ‘Línea Alba’, y su visibilidad se debe a la subida de hormonas como la progesterona y los estrógenos que estimulan la melanina, es decir, la pigmentación de la piel.
Cuando los bebés ya tienen seis o siete meses de nacido, sus dientes comienzan a aparecer, sin embargo, han existido casos donde los pequeños nacen con ellos. La aparición de los dientes natales y neonatales suele estar asociada a factores hereditarios, pero pueden aparecen también sin tener antecedentes.