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En los últimos tiempos, ha surgido una práctica cada vez más popular en los centros comerciales: el cuidado de mascotas en áreas donde su entrada no está permitida. Esta modalidad implica dejar a los animales encerrados en casilleros similares a las casas para perros, bajo la supervisión de empleados de empresas especializadas en este servicio.
El propósito principal es garantizar el bienestar de las mascotas mientras sus dueños realizan sus compras u otras diligencias en el establecimiento.
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El Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal de Bogotá (IDPYBA) ha emitido recomendaciones sobre estos casilleros. Aunque ofrecen una sensación de seguridad al evitar que las mascotas escapen, se enfatiza en la responsabilidad de los propietarios de cuidar a sus animales tanto en espacios públicos como privados.
Por lo tanto, no se aconseja dejar a las mascotas atadas a postes, bicicleteros o ganchos para traíllas, así como utilizar estos casilleros, donde las mascotas pueden enfrentar diversas situaciones que pongan en riesgo su bienestar emocional y físico.
Natalia Parra, subdirectora de Cultura Ciudadana y Gestión del Conocimiento del IDPYBA, advierte sobre los peligros potenciales para las mascotas en estas circunstancias. Desde ingerir sustancias nocivas hasta sufrir ataques de otros animales o transeúntes, las mascotas pueden enfrentar situaciones peligrosas cuando se dejan sin supervisión en áreas públicas.
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El IDPYBA reitera la importancia de que los propietarios sean conscientes de su responsabilidad y obligación de garantizar la salud, seguridad y bienestar de sus mascotas. Se recomienda evitar llevar a las mascotas a hacer compras o diligencias, optando en su lugar por dejarlas en casa en un ambiente seguro y familiar. En caso de no contar con esta opción, se anima a buscar alternativas amigables con los animales, como establecimientos pet-friendly, para asegurar que las mascotas nunca estén en peligro durante las salidas.
