El arriendo sigue ganando terreno como la principal forma de vivienda en Colombia y, con ello, crece la preocupación de miles de familias por el ajuste anual del canon. De cara a 2026, las proyecciones de inflación ya permiten hacer cuentas sobre cuánto podría subir el alquiler, especialmente para quienes hoy pagan cifras superiores a los $2 millones.
Arrendar vivienda dejó de ser una alternativa temporal y se consolidó como la principal forma de tenencia en el país. Un informe reciente de BBVA Research sobre el panorama inmobiliario muestra que, por primera vez, los hogares en arriendo superaron a los propietarios.
El análisis revela que actualmente hay cerca de 7,3 millones de hogares viviendo en arriendo, mientras que 7,1 millones habitan vivienda propia, una diferencia que marca un cambio histórico en el mercado inmobiliario.
Las cifras oficiales respaldan este comportamiento. De acuerdo con la Encuesta de Hogares del Dane, para el primer trimestre de 2023 la demanda de inmuebles en arriendo creció 7 % frente a 2022, representando el 40,3 % de la población.

Un año después, en 2024, Colombia alcanzó el porcentaje más alto de hogares en arriendo en América Latina, con cuatro de cada diez familias viviendo bajo esta modalidad, lo que refuerza la presión sobre el mercado de alquiler.
¿Por qué sube el arriendo cada año?
El incremento del canon no es arbitrario. En Colombia, el ajuste anual del arriendo está ligado directamente a la inflación. La Ley 820 de 2003 establece que el valor del alquiler de vivienda solo puede aumentar una vez al año y hasta el IPC del año inmediatamente anterior.
Por eso, con las proyecciones económicas sobre la mesa, los arrendatarios ya anticipan el impacto que tendría el ajuste en 2026.
Las estimaciones del Banco de la República indican que la inflación de 2025 podría cerrar alrededor del 5,1 %. Otros analistas son un poco más cautelosos y consideran que el dato podría ubicarse cerca del 5,5 %.

En cualquier escenario, el incremento no sería muy diferente al registrado en 2024, cuando la inflación cerró en 5,2 %, lo que da una idea clara de cuánto subirían los arriendos.
Así quedaría un arriendo de $2 millones en 2026
Para entender el impacto en el bolsillo, basta con hacer un cálculo sencillo:
- Si el IPC cierra en 5,1 %:
Un arriendo de $2.000.000 tendría un aumento aproximado de $102.000, por lo que el nuevo canon sería de $2.102.000. - Si la inflación llega al 5,5 %:
El incremento sería de $110.000, llevando el arriendo mensual a $2.110.000.
Este ajuste aplicaría únicamente cuando se cumpla el año del contrato o la fecha pactada para el incremento.