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Pedaleando por la Paz: el equipo indígena del CRIC que transforma el ciclismo en el Cauca

Jóvenes indígenas del Cauca transforman el ciclismo con el equipo del CRIC, que pedalea por la identidad, la esperanza y la paz. Esta es su historia.

Publicado:
Actualizado:
Martes, Octubre 7, 2025 - 09:56
Equipo de Ciclismo CRIC Nacional
Equipo de ciclismo indígena del Cauca pedalea por la identidad y la paz en Colombia. Jimy Morales lidera el proyecto transformador con jóvenes Nasa y Kokonuko.
Camila Díaz - RCN Radio

Un grupo de jóvenes indígenas del Cauca está cambiando la historia del deporte colombiano. El equipo de ciclismo del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) no solo compite: pedalea por la identidad, la esperanza y la paz, en una región marcada por la violencia.

En las carreteras del Cauca se está gestando una transformación profunda. Allí, un grupo de jóvenes ciclistas del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) está demostrando que el deporte puede ser una vía para el orgullo, la identidad y la paz. El equipo, dirigido por Jimy Morales, agrupa a deportistas de los pueblos Nasa, Kokonuko, Totoroez y Misak, junto a jóvenes campesinos y corredores boyacenses, en un proyecto que trasciende la competencia por una apuesta por la vida.

“Queríamos mostrarles a los jóvenes otra alternativa de vida: que se puede vivir del deporte. En el Cauca siempre ha habido muy buenos ciclistas, pero muchos no pudieron salir adelante por falta de apoyo”, cuenta Morales, de 25 años, hoy director técnico del equipo. Jimy nació en el pueblo Misak y tiene experiencia compitiendo en Europa.

Durante más de una década fue ciclista activo y corrió con los equipos Trek Junior y G.S. Maltinti Lampadari en Italia, donde llegó a ser subcampeón en la Vuelta a Cataluña y tercero en la Vuelta a Cantabria.

Jimy Morales, Director Técnico CRIC Nacional
Jimy Morales, director Técnico CRIC Nacional, nació en el pueblo misak y tiene experiencia corriendo en Europa.
Camila Díaz RCN Radio

“Fue una experiencia muy bonita, de mucho aprendizaje. Por la pandemia no pude seguir corriendo en Europa; era mi mejor momento, pero me tocó regresar a Colombia. Luego ya la edad no me favorecía, así que decidí estudiar entrenamiento deportivo en la Universidad Autónoma de Popayán”, recuerda.

Del sueño al equipo profesional indígena

De regreso en su tierra, Jimy encontró en el CRIC una oportunidad para aplicar todo lo aprendido.
Junto con Delio Trujillo dio forma a un sueño: crear un equipo indígena profesional de ciclismo que abriera caminos a los jóvenes del Cauca. “El 80 % de los ciclistas del equipo son indígenas; los demás no lo son, por eso decimos que es un equipo intercultural. Empezamos con la Clásica de Popayán, luego participamos en la Vuelta a Nariño y la Vuelta a Boyacá. Este año ya registramos el equipo ante la Federación Colombiana de Ciclismo como profesional y hemos estado en todo el calendario nacional”, explica con orgullo.

El CRIC, una organización histórica en la defensa de los pueblos originarios del suroccidente colombiano, ha ampliado su trabajo al deporte. Morales detalla que hoy hay cinco iniciativas deportivas en marcha: ciclismo, atletismo, patinaje, natación y arco y flecha.

“Hemos podido darles a los muchachos cosas que yo no tuve: bicicletas, materiales, uniformes, cascos, zapatillas, ciclocomputadores (…) incluso un apoyo económico. Eso me alegra mucho. Ellos han respondido con compromiso y resultados”, agrega.

Historias de superación sobre dos ruedas

Uno de esos deportistas es el ciclista élite Leison Damián Maca Viveros, del pueblo Kokonuko, perteneciente al cabildo de San José de Julumito, en Popayán. Tiene 27 años y su historia también está marcada por el esfuerzo y la familia. “Mi pasión por el ciclismo nace gracias a mi padre, a quien siempre le gustó este deporte. Desde los 10 o 12 años veíamos juntos el Tour de Francia y la Vuelta a España. Yo en realidad prefería el fútbol, pero a los 17 años mi papá me obligó, literalmente, a montar en bicicleta”, recuerda entre risas.

Leison Maca, Ciclista CRIC Nacional
Leison Maca, ciclista CRIC Nacional, tiene 27 años y su historia también está marcada por el esfuerzo y la familia.
Camila Díaz, RCN Radio

Después de su paso por el equipo profesional SuperGiros, Leison se quedó sin escuadra hasta que Morales lo contactó: “Fue entonces cuando Jimy Morales, quien estaba iniciando el proyecto del CRIC, me llamó y me invitó a unirme para ayudar a impulsarlo. Comenzamos el año pasado y desde ahí el proyecto empezó a crecer.”

En el Clásico RCN Sistecrédito 2025, el equipo fue protagonista: lograron tres títulos y se midieron de igual a igual con los grandes del país.

“Poder llevar la imagen del CRIC a nivel nacional y hacerlo con un gran papel es motivo de orgullo. Fuimos protagonistas, ganamos tres títulos y marcamos una parte de la historia del ciclismo colombiano como equipo indígena”, afirma Maca, quien este año se coronó campeón de las Metas Volantes y de la Gran Diferencia, además de luchar por los Sprint Especiales.

“Nuestro lema es ‘Pedalea por la paz’. Queremos que los jóvenes vean en el deporte una salida, una forma de vida distinta, que puedan viajar, conocer y cumplir sueños. Estamos salvando vidas y creando esperanza.” Su voz se vuelve más firme al hablar de su tierra: “En el Cauca la violencia, el narcotráfico y la presencia de grupos armados han afectado mucho a la juventud. Con este proyecto queremos alejarlos de ese contexto. Cada ciclista del equipo se ha convertido en un referente en su territorio.”

Un futuro que se construye pedaleando

Su compañero Edwar Rondón Buitrago, de 22 años, viene de Pachavita, Boyacá, tierra de montañas frías y tradiciones campesinas. “Empecé en el ciclismo por mi papá, que siempre ha sido un aficionado. Desde niño me inculcó el amor por este deporte, aunque al principio me gustaba más el fútbol.” Su primer equipo fue el Team Tibaná, luego corrió con Team Boyacá y en 2024 vivió la experiencia de competir en Portugal con el Portos WINDMOB.

A comienzos de 2025 pensó en retirarse: “Estaba buscando equipo y no encontraba. Hice pruebas en el equipo Boyacá es para Vivirla, pero no clasifiqué. Estaba pensando en dejar el ciclismo cuando mi profesor me dijo que no lo hiciera, que siguiera intentando. Él se contactó con Jimy Morales, quien fue su alumno y ahora es el director técnico del CRIC Nacional. Así llegué al equipo, donde me recibieron con los brazos abiertos.”

Desde entonces, Edwar ha acumulado resultados destacados: segundo en la clasificación de montaña en la Vuelta a la Juventud, cuarto sub-23 en la Vuelta a Colombia y pódium en la Clásica Futuras Estrellas, junto a su compañero Leison Maca. Recientemente, Edwar fue mejor novato del Clásico RCN Sistecrédito 2025. “Aquí me siento como en una familia, hay un ambiente de compañerismo y todos trabajamos por un mismo objetivo. No hay envidias, solo apoyo mutuo.”

Edwar Rondón, ciclista CRIC
Recientemente, Edwar fue mejor novato del Clásico RCN Sistecrédito 2025.
Camila Díaz-RCN Radio

Los entrenamientos del equipo se desarrollan en rutas que unen Popayán, Totoró, Silvia, Santander de Quilichao y El Bordo. “Entrenamos entre 3 y 4 horas diarias y descansamos solo un día a la semana”, dice Morales. La exigencia es alta, pero los resultados se notan.

En el Clásico RCN Sistecrédito 2025, el equipo CRIC Nacional fue la revelación: “Estuvimos mano a mano con los equipos grandes. Esa confianza se ha construido con trabajo y con la experiencia en Europa, la cual trato de transmitirles. Mentalmente siempre les digo que todos somos iguales, que nadie es menos que nadie.”

Un equipo que pedalea por la paz y la identidad

El equipo también es un símbolo para sus comunidades. Morales destaca historias que lo emocionan: “Por ejemplo, tenemos a Fabián Penagos, de Toribío, sobreviviente de una chiva bomba. El ciclismo le cambió la vida; antes no hablaba y ahora da entrevistas. También tenemos un niño de 15 años, campeón nacional de ciclomontañismo, que perdió a su padre en el conflicto armado. Casos como esos nos muestran que el ciclismo puede salvar vidas.”

El impacto del proyecto ya se siente en los territorios. “Con este proyecto hemos logrado reducir el riesgo de reclutamiento. Ahora hay muchos niños practicando ciclismo y otros deportes. Queremos mostrar que sí se puede vivir del deporte y construir paz desde los territorios”, explica Morales.

Leison Maca lo complementa con una reflexión: “El deporte aleja a los jóvenes de los malos caminos, les enseña disciplina, responsabilidad y compromiso. Aunque no todos lleguen a ser profesionales, el deporte forma mejores personas.”

A futuro, Jimy Morales sueña en grande: “Para el próximo año queremos conformar un equipo prejuvenil, juvenil, femenino, y mantener las categorías élite y sub-23. Ya no iremos solo por las camisetas, sino a pelear la clasificación general. En unos años me imagino al equipo como un equipo continental, corriendo en Europa. Ese es el sueño.”

Cada pedalazo del equipo del CRIC es una declaración de resistencia, identidad y esperanza.

“Que los jóvenes luchen por sus sueños, que nunca dejen de soñar. Que se preparen y sigan el ejemplo de los muchachos del equipo del CRIC. Los sueños se cumplen.” Así cierra Morales, convencido de que en el Cauca, esa tierra de montañas, niebla y espíritu indómito, también se pedalea por la vida.

Fuente:
Sistema Integrado Digital