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Las dudas que deja el secuestro de una psicóloga en Ituango

La víctima es esposa de un exalcalde de San Andrés de Cuerquia. Logró comunicarse con su familia.

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Martes, Septiembre 3, 2019 - 09:24
Mujer fue secuestrada en Ituango, Antioquia.
Cortesía @AlcaldiaSAC.

La psicóloga Doralba Agudelo, de 63 años, completó una semana secuestrada por hombres armados que ingresaron a la finca de su hijo en Ituango y se la llevaron a la fuerza. El plagio ocurrió en presencia de un conocido, el mayordomo y su pareja.  Ni la mujer ni su familia habían denunciado amenazas.

Javier Penagos, esposo de la víctima, fue alcalde de San Andrés de Cuerquia en el periodo 2004-2007. El abogado contó que solo ha recibido una corta llamada de su esposa, en la que le contó que desconocía las razones de su secuestro.

"Por ahí sí llamaron y me la pasaron para un saludito de 15-20 segundos y que, posteriormente, me llamaban. Me dijo que la estaban tratando bien, que no sabía dónde estaba, ni sabía por qué la tenían y hasta ahí llegó. La sentí fuerte, con mucho valor, pero al momento de despedirse, se le quebró la voz", señaló.

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Los habitantes de San Andrés de Cuerquia, pueblo natal de Javier Penagos y donde trabaja una de sus hijas, marchó por las calles del municipio para exigir la liberación de Doralba. Su esposo les pidió a sus captores que le respeten la vida.

"Les pedimos que al menos le respeten la vida, puede ser un secuestro equivocado, por favor, que la liberen. Ella tiene su hogar y su familia y la estamos necesitando.  En el municipio de San Andrés, hubo una marcha para pedir su liberación",  expresó.

Aunque los secuestradores no se identificaron, las primeras investigaciones señalarían a la estructura residual 18 de las Farc, que tiene injerencia en el Norte antioqueño.

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Una de las preocupaciones es que Doralba, oriunda de Liborina, sufre de la presión y de retención de líquidos, así que debe tomar medicamentos. Su secuestro se suma al de la comerciante Diana María Toro, ocurrido a finales del año anterior en Amaga. Sus captores la entregaron al ELN, grupo que la habría llevado a Chocó.